23-F
Este pueblo español tan sufrido y tan calumniado (¿quiénes son los que llevan años y años dicielido que somos un pueblo ingobernable?) creo que se siente hoy, en su gran mayoría, estupefacto después de haberse destapado la olla maloliente del sumarlo del 23-F.Estupefacción, sobre todo, por ver en los encartados una actitud tan contraria al espíritu que deblera prevalecer en quienes se consideran abanderados del honor y del patriotismo a ultranza. Y también vergüenza ajena sentimos ante el bochornoso espectáculo que nos están dando con tal falta de gallardía. Pues, aunque me parezca legítimo el derecho que pueclan tener a defenderse (que se lo da con creces esa Constitución tan denostada por ellos), no lo tienen a mentir para exculparse, manchando con ello la limpia ejecutoria de nuestras FF AA.
Sin embaroo, director, a este viejo pueblo español tan sufrido y calumniado (ya sabemoa quiénes son los que llevan años y años diciendo que somos un pueblo ingobernable) ya no es tan engañarle nuevamente; ni borrarle de sus retinas unas imágenes escalofríantes que nunca debieran de haberse producido; ni escamotear a nuestras memorias aún impresionadas las palabras amenezadoras, antidemocráticas, y hasta malsonantes y bastas, que escuchamos aquella triste noche del 23-F. Ni ahora, director, ni siquiera "todos los perfumes de Arabia" serían suficientes para tapar tanta suciedad como se está vertiendo y destapando.
¿O es que también pretenderán meternos en la cabeza que lo que hemos visto y oído aquella maldita noche fue fruto de una alucinación colectiva? Y ahora, ¿tendremos que ir pensando que el Elefante, el Naranjas y el primo de La Coruña son nada más que unos chorizos como los del Banco Central de Barcelona o los remoquetes de unos radioaficionados?
Por favor, un poco más de respeto para este pobre pueblo español que se afaríaen salir adelante, pese a las mil trarapas que se nos tienden por todos lados (como la del aceite de colza, por ejemplo, y tantas más que tenemos que ir sor
Pasa a la página 8
Viene de la página 7
teando para poder sobrevivir...) /
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.