La negociación del ingreso de España, paralela a la reestructuración agrícola de la CEE, según Schmidt

La actual reestructuración de la política agraria comunitaria debe tener en cuenta el futuro ingreso de España en la Comunidad Económica Europea, ha declarado a Efe el canciller federal alemán Helmut Schmidt. El jefe del Gobierno alemán ha hecho referencia a los excedentes agrícolas cuya financiación retiene gran parte del presupuesto comunitario: «El problema de los excedentes, con sus secuelas financieras, se agravará con el ingreso de España. Hemos de tomar medidas para impedirlo, tanto en las actuales negociaciones de reestructuración de la Comunidad, como en las del ingreso con el Gobierno español».En el curso de una entrevista con Efe, Schmidt se apartó de la teoría francesa según la cual la Comunidad tiene que esperar a resolver sus problemas para acoger a nuevos miembros: «Las negociaciones para el ingreso de España», dijo, «deben desarrollarse paralelamente a las de reestructuración financiera y agrícola comunitaria».

El canciller alemán ha señalado las dificultades que para España traerá la incorporación a Europa: «También España tendrá crisis de adaptación. Su industria se enfrentará a una mayor competencia de otros países industrializados, después de la apertura de fronteras. Especialmente muchas empresas medianas y pequeñas tendrán dificultades».

Schmidt también ha señalado la necesidad de «reducir en lo posible estas dificultades mediante acuerdos que equilibren las condiciones de ingreso», relativas al período de transición.

Pero España, añadió, «tiene que emplear el tiempo que falta hasta el ingreso para introducir modificaciones estructurales que permitan a su industria adaptarse mejor a las condiciones del mercado comunitario».

«Una de estas modificaciones», ha especificado, «es introducir en España el impuesto sobre el valor añadido».

El canciller alemán confía en que «la economía española obtendrá notables ventajas del ingreso, siempre que se adapte a las exigencias del mercado europeo. Después de un comienzo sin duda nada fácil que, repito, habrá de ser tomado en cuenta en las medidas de transición del acuerdo de ingreso, la economía española será más competitiva»

«El flujo de capital y know-how», prosiguió, «de otros países comunitarios, las mejores posibilidades para acceder a un gran mercado sin barreras aduaneras, y la participación en fondos comunitarios, pueden ser una notable ayuda para el desarrollo de la economía española».

Refuerzo político a la Comunidad

Para Schmidt, «la incorporación de España a Europa es un proceso natural. España sigue así la vocación europea a que ha sido fiel a través de los siglos. Su ingreso, como el de Portugal, representa un refuerzo político de la comunidad y una fuente de inspiración ».

España es para Europa un enriquecimiento: «Puede acercarnos más al mundo árabe y ayudarnos a comprenderlo mejor. La política europea en Oriente Medio, basada en el derecho de autodeterminación palestino y la existencia del Estado de Israel, recibirá un impulso».

Schmidt se ha referido también a la «importancia de la situación de España a la entrada del Mediterráneo», al hablar del «papel para la seguridad de Europa occidental» y, aunque repitió su tesis de que «no queremos influir en favor o en contra», señaló que «el ingreso de España en la OTAN beneficiará la seguridad de Europa occidental».

Descartó que su incorporación a la OTAN afecte la política de distensión: «El acta final de Helsinki establece el derecho de cada Estado europeo a pertenecer a un pacto, principio reconocido por el Pacto de Varsovia. España no alteraría la relación de fuerzas Este-Oeste, pues, por sus acuerdos con EE UU, pertenece desde hace tiempo al sistema defensivo occidental».

Considera a España amenazada por Moscú: «La mayoría de los cohetes SS-20, con un alcance de 5.000 kilómetros, se dirigen contra Europa occidental, y, debido a su alcance, también amenazan a España».

«Desde el continente africano, en cambio, me parece por ahora improbable que exista un peligro para España». .

Por último, Schmidt ha resaltado su confianza en la democracia española: «Con el fracaso del intento de golpe del 23 de febrero, ha superado una primera prueba. Confío en que su estabilidad se mantendrá y reforzará, confianza que se apoya en los acontecimientos de los últimos meses»