El Consejo del Deporte de Africa critica la gira de los Springboks

El Consejo Superior del Deporte de Africa (CSSA) estima que las manifestaciones contra la presencia en Nueva Zelanda del equipo de rugby de los Springbooks dejan traslucir «la prudencia y la desaprobación del pueblo neozelandés frente a la hipocresía de sus dirigentes». Deberían servir de «advertencia para otros Gobiernos que continúan manteniendo relaciones deportivas con Suráfrica y a todos aquellos que han sido tentados para seguir en este campo de vergüenza».

El CSSA deplora, igualmente, que el Gobierno de Estados Unidos haya concedido visados de tránsito a los jugadores del equipo racista para dirigirse a Nueva Zelanda, y pide que sea anulada la invitación que este mismo Gobierno ha cursado a los Springbooks para disputar tres partidos en Estados Unidos, el próximo mes de septiembre.

Recuerdan en fin, los precedentes de partidos efectuados en las mismas circunstancias y «las seguridades recibidas en su tiempo», por los que el Consejo Superior del Deporte de Africa «invita encarecidamente al Gobierno de Estados Unidos a reconsiderar su actitud, que arriesga gravemente el futuro de las relaciones deportivas entre este país y Africa».

Derechos humanos en Africa

Por otro lado, el primer ministro de Nueva Zelanda, Robert Muldoon, confirmó en Londres que su Gobierno no prohibirá la gira del equipo surafricano de rugby, a pesar de las violentas manifestaciones producidas en su país. El ministro, que se encuentra en la capital británica con motivo de asistir a la boda de hoy entre el príncipe Carlos y ladi Diana, fue recibido por unas decenas de manifestantes antiapartheid a su llegada a la Marlborough House. Mientras el primer ministro australiano, Malcom Fraser, ha calificado la gira de inaceptable, y que por ello la Commonwealth corre el riesgo de sufrir y el apartheid de salir triunfador, Muldoon dijo que en la próxima conferencia de ministros de la comunidad británica -prevista para septiembre, en Melbourne, y que podría ser boicoteada por los quince países africanos si éste se presenta-, revelará, como contestación, los casos de violación de los derechos humanos en Africa.