La policía rescata a la niña secuestrada en Barcelona y detiene a la autora del hecho

A las dos de la tarde de ayer fue detenida, en Lloret de Mar, Aurelia Rodríguez Bravo, de cincuenta años de edad, y recuperada la recién nacida que el pasado martes había sido sustraída a su madre en una clínica de Barcelona, donde había nacido tres días antes. Ayer mismo fue entregada a su madre, que permanecía en la misma clínica.

La detenida está casada, pero, al parecer, vive separada de su marido, con una sobrina. Nunca tuvo hijos. La finalidad del rapto era precisamente aparentar que la criatura era hija suya. Para ello, según fuentes policiales, había simulado estar embarazada.La recién nacida fue hallada en perfecto estado de salud, ya que durante los días en que estuvo en manos de la detenida fue cuidada con toda atención. Poco después de recuperada por la policía, la niña fue atendida por un pediatra, quien la halló en perfecto estado de salud. Se da la circunstancia de que durante el tiempo que duró el secuestro la pequeña aumentó su peso en doscientos gramos, según comprobó el pediatra que la atendió en Lloret de Mar, nada más producirse el hallazgo. Este aumento de peso ha evitado que la niña haya tenido que ser colocada en una incubadora.

La raptora fue fácilmente localizada por la policía barcelonesa. Esta agradeció formalmente a los medios de comunicación y a la ciudadanía la colaboración prestada a su labor. Gracias a esta colaboración antes de veinticuatro horas fue localizado el taxi que había tomado la raptora. El taxista indicó que la había dejado en la estación de Francia.

Colaboración ciudadana

A continuación varias personas respondieron a las llamadas de colaboración efectuadas por la policía e informaron que una mujer, de las características facilitadas por los medios de comunicación, había sido vista tomando un tren de cercanías y posteriormente se apeó en la localidad de Mataró.

En la mañana de ayer, en esta última ciudad, la policía localizó un taxista que había conducido a la raptora a Lloret de Mar. El taxi la había dejado enfrente mismo de la casa que habitaba. Su detención no representó ninguna dificultad. Todo indicaba que Aurella Rodríguez obró sola y con el único afán de satisfacer sus deseos de aparentar ser madre. La detenida carecía de antecedentes. Según las apariencias, obró con premeditación; ya el día anterior había estado inspeccionando la clínica de donde sustrajo a la niña. La elección de la niña la hizo sólo en base a la situación de la habitación.

Momento de emoción

La sobrina de la secuestradora pidió a la policía que le dejaran ir personalmente a Barcelona para hacer entrega de la pequeña a sus padres. La sobrina de Aurelia Rodríguez Bravo manifestó que con este gesto quería desagraviar a los familiares de la niña. También indicó a la policía que desconocía totalmente las razones que habían impulsado a su tía a obrar de esa manera. La policía accedió al deseo expresado por la joven y ésta les acompañó a la clínica del Pilar, de Barcelona, donde, según cuenta la agencia Efe, reintegró la pequeña a los suyos en un momento de gran emoción.

El primero que dio la noticia a los periodistas del buen estado de la pequeña fue su padre, Enrique Vila. «El pediatra que ha atendido a mi hija en Lloret me acaba de comunicar que la niña se encuentra en perfectas condiciones», dijo emocionado el padre a los primeros informadores que acudieron a la clínica del Pilar, mientras se esperaba la llegada de la pequeña desde Lloret.

Enrique Vila indicó que uno de los primeros en comunicarle la noticia del rescate de la niña fue el jefe superior de Policía de Barcelona. Inmediatamente después del comisario Enrique Mosquera se puso en contcto con la familia el gobernador civil dimisionario de Barcelona Josep Coderch. Enrique Vila indicó que al día siguiente del rapto el presidente de la Generalidad de Cataluña y su esposa se habían personado en el domicilio familiar.