La playa de la Albufereta (Alicante), abierta al público a pesar de su elevada contaminación
La fuerte contaminación que registra la playa de la Albufereta, en la ciudad de Alicante, que sobrepasa los máximos legales permitidos sanitariamente, ha llevado a las autoridades locales a recomendar a los bañistas que no utilicen dicha playa por el momento, hasta tanto se resuelvan las causas que han dado lugar a la contaminación. La playa se encuentra abierta al público.Los estudios del análisis de las aguas fueron encargados por el Ayuntamiento al departamento de microbiología de la facultad de Medicina y al de Química Técnica de la facultad de Ciencias de la Universidad de Alicante, entidad que ya realizó estudios similares en veranos anteriores y en los que ya se ponía de manifiesto la contaminación allí existente, lo que ha motivado que apenas acudan bañistas, pese a ser una de las playas donde tradicionalmente acudían los alicantinos.
Los estudios llevados a cabo han destacado que tan sólo la playa de la Albufereta ofrece contaminación y es correcto el estado sanitario de las restantes playas de la ciudad.
En opinión del concejal deIegado de Ecología y Medio Ambiente, «el origen de la contaminación de la playa se debe a las aguas locales de las urbanizaciones de la zona, que por su Infraestructura sanitaria deficiente vierten al mar. Esa es una zona que está saturada de viviendas, sin que cuando se construyeron se les exigiera el cumplimiento de las normas urbanísticas. Se consintió la especulación privada en perjuicio del interés público. Se construyó mucho sin pensar en los servicios necesarios».
A la saturación de viviendas en la Albufereta hay que añadir la rotura del emisario submarino que se produjo el pasado invierno, a consecuencia de los fuertes temporales que azotaron toda la costa; precisamente ahora, el Ayuntamiento está procediendo a su arreglo y a dotarlo de una mayor longitud, hasta un total de dos kilómetros y medio, frente a los 280 metros de que constaba el anterior. El que se estén realizando estas obras ha venido a crear aún mayor dificultad a los bañistas que acudían a esta playa, ya que, prácticamente todo el utillaje de la construcción se encuentra sobre las arenas.
El plazo de terminación dado a la constructora del emisario submarino es de un mes en su primera fase y, según indicaba el concejal de Ecología y Medio Ambiente, «es de esperar que con su construcción quede definitivamente resuelto el problema de contaminación de esa zona de la playa». Los estudios se realizan en todas las playas de forma regular.
Pese a todo, la playa sigue formalmente abierta. «El Ayuntamiento», ha dicho el concejal, «no tiene competencia para cerrar una playa. Eso corresponde al Consell.
