La residencia de Cruces, en Bilbao, saturada por la huelga en hospitales

La residencia de Cruces -el más importante centro sanitario de Vizcaya- se encuentra saturada de enfermos a consecuencia del retraso que, por efecto de la huelga de médicos de centros hospitalarios de la Seguridad Social, iniciada el pasado día 16, viene experimentando la expedición de las altas, según informa Patxo Unzueta.

Ante esta situación, la Dirección Provincial del Insalud ha difundido un comunicado recordando a los enfermos la posibilidad de solicitar voluntariamente el alta, abandonando la residencia, si sus condiciones fisicas lo permitieran. La sugerencia va dirigida en particular a las parturientas, que, a la espera del alta médica oficial, siguen en el centro más allá del plazo habitual. Las negociaciones de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos oon las autoridades sanitarias podrían hacer concluir próximamente el conflicto, según ha afirmado a la agencia Efe el presidente de la CESM, Javier Valero. Sin embargo, la asamblea de representantes de hospitales de la Seguridad Social en huelga acordó ayer radicalizar más aún los mínimos asistenciales.Esta aparente contradicción o «situación de bamboleo», como fue definida por un portavoz de la CESM, puede decantarse en un sentido o en otro, en función del curso de las negociaciones. Una entrevista concertada con el ministro Sancho Rof sobre cuestiones presupuestarias, principalmente, podría dar la clave definitiva del tema.

El principal interlocutor con quien hasta ahora había negociado la CESM, Luis Sánchez Harguindey, secretario de Estado para la Sanidad, salió ayer de viaje a Estados Unidos para asistir a la reunión panamericana de la salud.

Por otra parte, la Delegación Territorial de Sanidad y Seguridad Social de Madrid ha hecho pública su decisión de iniciar la apertura de expedientes por la huelga oficialmente considerada ilegal del Colegio Oficial de Médicos de Madrid.

En relación con ambos conflictos, diversos colectivos médicos continúan mostrando su oposición. En el centro Ramón y Cajal, de Madrid, 160 médicos han pasado por el registro general un escrito en el que se hace constar su no participación en las huelgas. Esta medida no es solamente una muestra razonada del rechazo a las mismas, sino una aportación al deslinde entre quienes participan realmente y quiénes no, con el fin de que las autoridades sanitarias puedan conocer con exactitud los nombres que le interesen respecto a las responsabilidades que hubiera lugar. También en Murcia se ha producido un hecho semejante en la residencia sanitaria Virgen de la Arrixaca.

Anoche, dentro de esta línea de contestación, se celebró un encuentro de médicos en la Universidad Complutense de Madrid, con el fin de llegar a acuerdos que clarifiquen la incidencia de estos conflictos y su verdadera repercusión.

La espiral de, la tensión creada por el conflicto en los hospitales de la Seguridad Social -de confuso seguimiento y participación-, seguida por la convocatoria de huelga del colegio de Madrid, podría verse auniditada los días 29 y 30 por otra huelga en el Hospital Provincial de Madrid.