Los conciertos económicos incrementan un 400% el presupuesto de la Diputación Foral de Vizcaya
Como primer efecto de la entrada en vigor de los conciertos económicos con la comunidad autónoma vasca, el presupuesto de la Diputación Foral de Vizcaya se incrementará este año en cerca de un 400%, pasando de los 4.000 millones de 1980 a los más de 15.000 millones del ejercicio en curso. Esta última cifra es el remanente que resulta de restar de los 72.000 millones de pesetas que recaudará este año la Diputación Foral los cupos que esta última deberá satisfacer a la Administración central y autonómica.La cifra destinada a la Administración vasca no está fijada aún con precisión, ya que depende de los criterios que al respecto establezca la ley de Territorios, cuya aprobación por el Parlamento vasco no se producirá antes del mes de septiembre. Pero, de confirmarse la distribución de cargas previstas en el anteproyecto presentado por el Gobierno vasco, la aportación vizcaína -un 55% del total- será de unos 25.000 millones de pesetas, es decir, aproximadamente la misma cantidad que deberá pagar Vizcaya a la Administración central en virtud de la ley del Cupo. Otros 7.000 millones deberán destinarse obligatoriamente a diversas transferencias a la Administración local, que hasta la aprobación del concierto económico eran responsabilidad del Estado.
Con todo, los más de 15.000 millones de que dispondrá este año la Diputación de Vizcaya suponen una cifra récord, especialmente si se tiene en cuenta que, a la espera de la aprobación de la ley de Territorios, muchas de las competencias que en su día tendrá que asumir la Diputación permanecen de momento en manos de la Administración autonómica como tal, es decir, del Gobierno vasco. Así las cosas, fuentes socialistas vascas consideran dudoso que la Diputación, en su nivel actual de desarrollo administrativo, sea capaz de canalizar convenientemente tan importante suma de dinero. No porque no haya necesidades sociales más que suficientes para absorber esos recursos, sino porque la ausencia de un organismo de planificación económica, similar al que existe, por ejemplo, en Alava convierte en relativamente alcatoria las previsiones de inversión sectorial que podría hacer, hoy por hoy, la Diputación vizcaína.
El tema será objeto de debate en el pleno que la Corporación vizcaína celebrará mañana, pero los portavoces de la minoría socialista adelantaron ayer, en conferencia de Prensa celebrada en Bilbao, su intención de votar a favor del anteproyecto presentado por el PNV tras haber obtenido de dicho partido un compromiso de distribución del gasto que canalice parte de los recursos provinciales a suplir las insuficiencias que, a juicio de los socialistas, contiene el presupuesto del Gobierno vasco en capítulos como la enseñanza.
