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No habrá cambios sustanciales en la programación de TVE hasta 1982

A partir del día 20 sólo se renuevan los informativos y los programas especiales

Hasta los primeros días de 1982 la programación de Televisión Española no experimentará cambios sustanciales, debido, fundamentalmente, a la falta de medios económicos, a la penuria de equipamiento, y a las dificultades de personal y organizativas con que se encuentra el actual equipo en su intento de cambiar el contenido y el estilo de los programas y la organización interna de trabajo de televisión. Miguel Angel Toledano, director de Televisión Española, calificó ayer, en una conferencia de Prensa, la nueva programación que comenzará a partir del próximo día 20 de este mes, como «un parche transitorio que no cambia sustancialmente la programación vigente».

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«El nuevo esquema es básicamente el anterior, con retoque en algunos programas; no tiene pretensiones de cumplir con la totalidad de necesidades de la audiencia. Intentará ordenar los programas con unos criterios más lógicos».Las dos únicas novedades de importancia de este replanteamiento urgente de la programación se refieren a los informativos, dirigidos por Ignacio Gabilondo, y a los programas especiales, que dirige José Luis Balbín.

Las razones completas por las que no se aborda una nueva televisión antes del año 1982 son, según el director de Televisión Española, las siguientes: 1) Faltan datos de las necesidades concretas y de las preferencias de audiencia, «por lo que se robustecerán y ampliarán con estudios sociológicos fiables los ahora existentes: panel de aceptación y estudios trimestrales de audiencia». 2) Es necesario un tiempo para diseñar seriamente una nueva programación. 3) Existe una preocupante carencia de equipamiento técnico. 4) Tenemos un sometimiento a un corsé económico de un presupuesto aprobado con anterioridad a la puesta en funcionamiento del nuevo equipo y que fue recortado por el Parlamento, como lo fue el del Mundial 82. 5) Porque las normas básicas de programación anual deben ser aprobadas por el Consejo del Ente Público RTVE.

Mientras no se consiga este esquema básico anual, los directivos de Televisión Española piensan diferenciar tres tipos de bloques: los diarios, de lunes a viernes, los de los fines de semana y los que coinciden con los tres períodos de vacaciones. Sobre las funciones de la segunda cadena, Miguel Angel Toledano dijo que quiere que sea una opción real y equivalente a la primera, aunque no será competitiva en un sentido estricto. De momento, la segunda cadena no perderá los temas tradicionales, más cercanos a la cultura y a círculos que algunos han calificado de minoritarios. Esta condición de minoritarios puede derivar también del hecho técnico de que el segundo programa de Televisión tan sólo llega al 60% de la audiencia que alcanza el primer programa, y lo curioso es que, por mucho que se perfeccionara el sistema de repetición, tan sólo alcanzaría el espectro tope del 85% del territorio nacional.

Reestructuración del personal

Uno de los problemas más graves, además de la escasez de medios económicos, que apenas permiten la producción propia, con los que se encuentran los directivos de Televisión es el de la reestructuración del personal. Algunos sectores de este personal, acostumbrados al anterior ritmo y estilo de trabajo, se resisten ahora a la integración en las nuevas líneas. Otros sectores protestan al sentirse marginados. Miguel Angel Toledano explica que habrá dificultades porque durante algún tiempo seguirán caminando juntas la estructura antigua y la nueva, «porque no se puede cambiar todo de la noche a la mañana». Sobre la campaña desatada por determinados sectores en torno a una posible «creación de un nido de rojos», entre el nuevo equipo y los que ellos han elegido para sus más directas actuaciones, el director de Televisión Española dijo que en la asignación de funciones para nada se ha tenido en cuenta las adscripciones políticas de nadie, sino únicamente la profesionalidad.Miguel Angel Toledano se refirió también a otros temas, como el de la producción, y dijo que serán muy cuidadosos con la compra de programas extranjeros y con la promoción de programas nacionales, y en este último apartado citó el caso de la suspensión de la producción de la película Viriato. A partir de ahora existe un doble control sobre la contratación de programas: la del servicio de adquisiciones y la de las direcciones de cada una de las cadenas.

Los informativos es la parte de la programación que va a restructurarse en profundidad en esta primera operación de parcheo. El director de los mismos, Ignacio Gabilondo, ha explicado que la reestructuración por secciones de los informativos es un intento de dar a este sector un modelo de funcionamiento que sirva igual, sea cual sea el director que esté al frente de los mismos, de acuerdo con lo que existe en cualquiera de las televisiones de países desarrollados. Ignacio Gabilondo se enfrenta y se enfrentará a varias dificultades. La primera será quizá la de los techos informativos a los que podrá llegar en su nuevo cargo. «No aceptamos otros techos que los que marca el Estatuto. Se trata de una etapa especial, ya que tenernos un nuevo instrumento jurídico para defendemos de los malos hábitos adquiridos. Nuestro combate, que no será fácil, es el de defender los intereses de la colectividad y no los pequeños intereses, pero, en la práctica cotidiana, todos sabemos que se producen muchas presiones».

Con diecinueve equipos en la primera cadena y siete en la segunda, Ignacio Gabilondo, que dirigirá también el informativo de las nueve a las diez de la noche, se propone cambiar el contenido y el estilo, ofrecer al espectador imágenes en vivo o recientes, siempre que se pueda, con las cámaras autónomas de que se dispone. Gabilondo pretende utilizar también un «tono menos sagrado», para contribuir a un entendimiento distendido de la actualidad.

El informativo de la noche (de nueve a diez), constará de dos bloques de media hora cada uno, el primero para dar las informaciones del día (no más de ocho), de acuerdo con un esquema más o menos clásico, como el que utilizan las televisiones europeas, mientras que en la segunda media hora se va a ofrecer un análisis o profundización en temas monográficos.

El informativo de sobremesa (de tres a cuatro de la tarde), que será dirigido por Pedro Macía, tendrá un diseño distinto. Se ofrecerá desde dos platós diferentes y alternará dando noticias que no serán las típicas de «la bella con gafas», o las del «simple Consejo de Ministros».

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