Importantes cambios en Senegal tras la dimisión de Senghor

La visita que efectúa hoy a Senegal el presidente mauritano Huna Uld Jaidala, veinticinco días después de la realizada a Nuakchot por el presidente senegalés Abdu Diuf, parece ser un testimonio más de los importantes cambios, que tienen lugar en Senegal a tan sólo cuatro meses del abandono del poder por Leopoldo Senghor.

Las relaciones entre los dos países en tiempos, del anterior presidente no siempre fueron buenas y a Senegal se le acusaba en la capital mauritana de adoptar una postura demasiado promarroquí en lo que al conflicto del Sahara respecta. Bien es verdad que Senghor había dicho que si Mauritania reconocía al Polisario, él pediría la independencia de los negros de Mauritania, estrechamente emparentados por lazos tribales con los de Senegal. La discriminación incuestionable de que eran objeto, los negros de Mauritania, en sus posibilidades, de acceso a los puestos claves políticos o administrativos del Estado, y en materia cultural, favoreció el ascendiente de Senghor sobre ellos.

Pero la misma renuncia, más o menos voluntaria de Senghor al poder, un hecho totalmente insólito en un continente donde lo normal es el asalto a las instituciones, vino a demostrar que el presidente de aquel país era un hombre singular, lo mismo que su sucesor hoy.

Sin embargo, los cambios más significativos que tienen lugar actualmente en Senegal son de carácter interno. El presidente Senghor se había lanzado -y continúa en ello- a promocionar por Africa una Internacional Socialista africana. Sin embargo, en su país no había tolerado el libre juego democrático de los partidos.

Hoy también el parlamento senegalés deberá pronunciarse sobre un proyecto de ley que le ha sido presentado por Diuf, y que garantizará vida legal a todos los partidos políticos de Senegal, sin excepción.