Todos los tipos de gasolina subirán mañana unas 6,50 pesetas por litro

Las gasolinas subirán muy posiblemente 6,50 pesetas por litro a las cero horas del próximo sábado, si el Consejo de Ministros de hoy aprueba definitivamente los cálculos que tres ministerios realizan a marchas forzadas sobre el proyectado aumento de los precios de los combustibles.Después que la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos comenzara el pasado martes el estudio técnico de esta subida, los ministerios de Hacienda, de Industria y de Economía llevan celebrando reuniones para tratar de equiparar criterios, que ayer continuaban siendo divergentes.

Fuentes consultadas en los tres departamentos señalaban ayer que la subida se situará en torno a las 6,50 pesetas para las gasolinas y el gasóleo de automoción, siendo inferiores estos incrementos para los otros tipos de gasóleos y para los fuel.

La razón de estos incrementos, que son superiores al 10% de los precios actuales, hay que buscarla en las subidas decididas por la OPEP en los precios de los crudos el pasado diciembre, que fueron también del orden del 10% y que no fueron repercutidas en su día.

Si la subida fuera de 6,50 pesetas, no se trasladaría, al menos a las gasolinas, el encarecimiento del crudo importado que ha supuesto para los españoles la fuerte depreciación de la peseta en los dos últinios meses. Esta depreciación, y la que venga en los próximos meses, constituye en estos momentos la máxima preocupación del Gobierno.

Subida inferior a la real

En este sentido, algunos expertos apuntan que para repercutir al consumidor el incremento de los costes del crudo importado la subida debería situarse, por lo menos, en torno a las diez pesetas. No obstante, hay que advertir que los ingresos fiscales derivados de los carburantes han sido algo superiores a lo previsto en los últimos meses, lo que permite en un principio restar de este capítulo parte de la diferencla marginal.El aspecto que más preocupa a los representantes de los diferentes ministerios es lo que pueda suceder en los próximos meses si continua la depreciación de la peseta al mismo ritmo. Algunas fuentes indicaban ayer que una cotización de cien pesetas por dólar forzará al Gobierno a imponer restricciones en el suministro de carburantes.

A este efecto se recuerda que el Ministerio de Industria tiene preparado desde hace tiempo un plan de urgencia para el caso de restricciones en estos suministros.

En estos momentos, el coste del barril importado es del orden de los 36,5 dólares, frente a los 33 dólares de media del último semestre de 1979, lo que supone un encarecimiento del barril en torno al 10%, como se apuntaba previamente. Sin embargo, la depreciación de la peseta en ese mismo período ha sido superior al 20%, lo que arroja luz suficiente para estimar que la subida tendría que ser muy superior a las seis y ocho pesetas estudiadas.

En este sentido, el Gobierno estudia el impacto sobre el IPC de una subida de estas proporciones.