Momento conflictivo para la reunión de los países "no alineados" en Nueva Dehli

Todo está preparado en Nueva Delhi para que el próximo 9 de febrero se inaugure la reunión del Movimiento de los Países No Alineados, que congregará en la capital de la India a los ministros de Exteriores de los países miembros del movimiento. Sesgada por múltiples conflictos entre Estados adscritos, como el que enfrenta a Irán e Irak, y con temas como el de Kampuchea y Afganistán o la incorporación de nuevos miembros entre Estados autoritarios de América Latina, la asamblea ha sido recibida con indiferencia por la Administración Reagan y, con certeza, va a convertirse en una reunión altamente conflictiva.

Continúa en Nueva Dehli la reunión preparatoria de la conferencia de ministros de Asuntos Exteriores del mundo no alineado, que precede a la que el día 9 reunirá en la capital india a 92 primeros diplomáticos de otros tantos países del Movimiento de los No Alineados, más los representantes de dos movimientos de liberación, miembros de pleno derecho, la OLP y el SWAPO, de Namibia. A diferencia de la cumbre de La Habana, en 1979, España no está presente esta vez en Nueva Dehli como país invitado junto a Estados neutrales de Europa. En un principio, la conferencia estaba prevista para el próximo otoño, pero ha sido adelantada por motivos de urgencia internacional. Entre los temas más apremiantes se considera el conflicto Irak-Irán, que enfrenta a dos países no alineados, la intervención soviética en Afganistán, la vietnamita en Kampuchea y el intento árabe de expulsar a Egipto de un movimiento que, hace exactamente veinte años, se fundaba con Nasser, Tito y Nehru a su cabeza, por ser acusado el país del Nilo de traicionar el espíritu del no alineamiento, al haber concertado una paz separada con Israel bajo la tutela de una gran potencia, Estados Unidos en este caso.La Prensa yugoslava dice que esta conferencia ministerial es comparable por su trascendencia, y la encrucijada política en que se celebra, a las cumbres más importantes de jefes de Estado del Movimiento no alineado. Una vez más se intentará un ambiguo retorno a las fuentes del no alineamiento: rechazo de toda injerencia en los asuntos internos de otros países, venga ésta de donde venga; no vinculación de los no alineados al carro de ninguna gran potencia o bloque militar y antiimperialismo. Por ello, la intervención soviética en Afganistán y la del Vietnam en Kampuchea recibirán una condena más o menos firme.

Es de notar que tampoco esta conferencia, como la anterior cumbre de La Habana, se celebra en terreno equidistante de Washington y Moscú. La India recibió hace pocos meses una visita decisiva de Leónidas Breznev, y varios países han criticado el tacto excesivo que, en su opinión, muestran los anfitriones de Nueva Delhi cara a Moscú en el tema de Afganistán. Al parecer, el proyecto de resolución preparado por los anfitriones indios no cita a la URSS, si bien pide la retirada de todas las tropas extranjeras de Afganistán.

Pero asegura el diario Indian Express que es probable que se retoque, ya durante la reunión preparatoria, el proyecto de resolución indio y aparezca claramente la Unión Soviética en el texto de rechazo. Por otra parte, el difícil andar con pies de plomo de los organizadores indios ha sido seguido muy de cerca por Arjipov, primer ministro adjunto de la URSS, que viajó a Nueva Dehli hace unos días a presidir una sesión del comité mixto económico indo-soviético.

Principio de "silla vacía"

No dejará de influir en el texto de una nueva condena a la intervención vietnamita en Kampuchea el hecho de que la conferencia se celebra en uno de los pocos países del mundo que reconocen al Gobierno de Heng Samrin, implantado en Kampuchea tras la agresión vietnamita contra el antiguo régimen prochino de Pol Pot. Como probablemente prevalecerá en esta conferencia el principio de «silla vacía» para Kampuchea, sin representantes del Gobierno resistente en la frontera con Tailandia, aunque sí del Gobierno Heng Samrin.El tema del conflicto Irak-Irán ha sido calificado de «muy fluido» y no está claramente elaborado en el proyecto de resolución. Indira Gandhi declaraba, a raíz de la visita del presidente mexicano, López Portillo, a la India el pasado día 27, que «esta conferencia no busca culpables, sino soluciones». Los círculos más optimistas de entre los no alineados buscan una solución de compromiso entre Bagdad y Teherán y creen que el ministro vietnamita de Exteriores podría acatar una conferencia internacional sobre Kampuchea, previo diálogo con representantes de la ASEAN. Pero si en la doctrina del no alineamiento hay tanto elemento de reconciliación y pacifismo, también es verdad que hoy día, sólo parejas de no alineados están en guerra.

Sahara y Puerto Rico

También se tocarán temas como los del Sahara occidental y del Chad, y probablemente Chipre, Timor y Puerto Rico. Estados Unidos ha sido siempre particularmente sensible a la consideración de este último caso en las conferencias de los no alineados, y los recientes ataques de Reagan contra movimientos de liberación ponen este tema al rojo vivo. Países como Yugoslavia, que ayudaron siempre a los movimientos de liberación, se resistieron, sin embargo, durante años a reconocer un caso colonial en Puerto Rico.El problema de las divisiones entre sectores revolucionarios, conservadores y centristas no alineados sigue presente. El ministro de Asuntos Exteriores de Vietnam, Ko Tak, declaraba hace unos días que «los yugoslavos nos dejaron colgados a principios de los años sesenta, cuando celebraron en Belgrado una conferencia de diecisiete países no alineados, ignorando nuestros puntos de vista». Ko Tak acusó a los yugoslavos de haber estado «siempre del lado de los norteamericanos». En su última conferencia de Prensa, el portavoz yugoslavo de Exteriores declaraba que Belgrado siempre apoyó a Vietnam «en su lucha contra la agresión estadounidense», pero que lo que ahora reprocha Ko Tak a Belgrado es la condena yugoslava de la intervención vietnamita en Kampuchea.

Esta conferencia tendrá un importante valor conmemorativo, por cumplirse ahora veinte años de la primera cumbre de los no alineados, en Belgrado, en 1961, a la que sólo asistieron veinticinco delegaciones.

Muchos de los representantes ahora veteranos del no alineamiento no eran entonces más que jefes de movimientos de liberación y el quinteto inicial del movimiento extrabloques, Tito, Nehru, Nasser, Nkrumah y Sukarno ha desaparecido.