Reducción en el impuesto de lujo en la compra de coches usados

El impuesto de lujo que grava las adquisiciones de vehículos usados ha sido reducido, según una nueva legislación que entró en vigor el pasado 1 de enero. Desde ese día, la cantidad a pagar es mucho menor, hasta el punto de que un coche medio de tres o cuatro años paga, aproximadamente, la mitad que antes. El objetivo del Ministerio de Hacienda es ir adecuando la legislación al sistema de impuesto de valor añadido (IVA) que funciona en casi toda Europa.Hasta el pasado 1 de enero, la adquisición de coches usados de menos de dos años estaba gravada con el pago del impuesto de lujo en la misma cuantía que si el vehículo fuera nuevo. Tan anacrónica situación -de esta forma, un mismo coche paga dos veces idéntico impuesto- se mantiene inalterada tras la reciente reestructuración.

Sin embargo, para los vehículos de más de dos años, las reducciones son importantes. Los de fabricación nacional tienen ya establecida por Hacienda una lista de cotización que decrece de forma importante por cada año de vida del vehículo. Además del valor teórico establecido por Hacienda, y una vez descontados los porcentajes correspondientes a cada año de vida, las primeras 266.000 pesetas -antes eran 180.000- no cotizan. De ahí que, para un automóvil de tres a cuatro años o más, la cantidad sobre la que se aplica el 26% del impuesto de lujo o es nula -en cuyo caso no se paga nada- o, en caso contrario, resulta muy pequeña.

Por lo que respecta a los automóviles de importación, para determinar la base imponible sobre la que aplicar el impuesto de lujo -siempre el 26%- es preciso llevar el vehículo a una inspección por parte de los ingenieros del Ministerio de Hacienda. Sobre esa base, según la nueva legislación, se aplican también las reducciones y, al igual que en los coches de fabricación nacional, las primeras 266.000 pesetas no cotizan.

Al igual que en la legislación precedente, la adquisición de vehículos con más de diez años de vida no paga impuesto de lujo.