La fuerza de la violencia
Sin necesidad de entrar en la discusión de los artículos de Sastre aparecidos recientemente en EL PAIS, sí quisiera hacer algunas reflexiones públicamente sobre la violencia y el terrorismo.En principio he de manifestar que repudio la violencia. No soy capaz de entender cómo se puede utilizar algo contra el hombre y que sea el mismo hombre quien lo haga. Pero el problema no es ese. Se trata de profundizar en las causas de ese fenómeno tan usual como es la fuerza. Quien la utiliza es porque no puede hacer otra cosa. Si alguien necesita de la violencia para demostrar algo es sencillamente porque no tiene razón o porque hay otra violencia que le prohibe utilizar los medios normales de actuación.
Cuando la violencia es un medio para rechazar la violencia no hay más remedio que admitirla, puesto que uno de los derechos fundamentales de la persona humana es precisamente defenderse de las agresiones. Pero cuando se utiliza la violencia para intimidar o contar con más poder del que realmente se: tiene, entonces la violencia no es sino un delito, en ningún momento justificable por ser delito.
¿Cuál es el caso de la violencia en el País Vasco? Creo sinceramente que responde a los intereses de unos cuantos que no han podido conseguir el poder que pretendían por otros medios distintos de la intimidación y el miedo.
Hace tiempo, cuando la dictadura franquista, muchos españoles veíamos con cierto agrado algunas de las acciones de ETA, tratando de terminar con el fascismo; pero esas acciones dejaron de ser liberadoras y pasaron a ser criminales.
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La fuerza de la violencia
Viene de página 9Cuando España consigue por fin un puesto en las democracias occidentales, no es lícito que un grupo de forajidos se permita gritar contra las instituciones que permiten que el pueblo vasco viva en paz y progreso. Quienes piensan en el terrorismo como medio de liberación de Euskadi lo único que están haciendo es precisamente matar Euskadi, matando a los que allí viven y luchan por vivir mejor. /
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