Un español implica a la Embajada argentina en el secuestro de sus dos hijas
Miguel Angel Meizoso, español nacido en Argentina, ha denunciado en Santiago de Compostela el secuestro de sus dos hijas, Paula María y Natalia Eva, ocurrido en Barcelona el 28 de abril, después de un intento frustrado de detener al padre y enviarle a Argentina por instrucciones no aclaradas suficientemente, cursadas en Madrid por la Interpol. Meizoso ha acusado a la Embajada argentina de estar implicada en el suceso.
Según el denunciante, en el secuestro intervinieron la madre de las niñas, Graciela Aida Celano; el abuelo Bartolomé Celano, Margarita Míguez y un tal Francisco. Dos días más tarde, el 1 de mayo, las dos niñas salieron de España por la frontera de Badajoz, después de un curioso incidente policial y judicial en el que intervinieron varios funcionarios de la Dirección de la Seguridad del Estado (DSE). Inicialmente, los acompañantes de las menores fueron retenidos en el puesto fronterizo, pero luego les fue franqueado el paso hacia Lisboa, «porque llevaban documentación argentina y para que no perdiesen los pasajes que tenían para viajar ese mismo día a Buenos Aires».En opinión de Miguel Angel Meizoso, psicoanalista que tuvo a su cargo la cátedra de Psicolopatología de la Universidad Nacional de Buenos Aires, de la que fue separado por el régimen de Videla, «un Gobierno extranjero invadió y burló la jurisdicción española no sólo con la actividad de la Embajada argentina en el secuestro de mis hijas, sino con la virtual complicidad activa de funcionarios judiciales españoles y de miembros ce la policía, ya que mi detención. primero, y luego el secuestro de mis dos hijas, con el agravante de privarme de la patria potestad que detentaba legalmente y de la tenencia material y la custodia de Paula y Natalia, constituyen un antecedente gravísimo contra el respeto de los derechos humanos en España».
Desde entonces no han cesado de gestionar la resolución de su caso ante los organismos e instituciones, públicos: o privados, que quisieron escucharla. A su favor se movilizaron de hecho, personalidades como el obispo auxiliar de Madrid, el presidente de la Comisión Justicia y Paz y el Grupo parlamentario Socialista.
Según el padre de las niñas supuestamente secuestradas, «en este allanamiento, de los derechos personales intervinieron personas estrictamente ligadas al régimen dictatorial de Videla, que contaron con la colaboración insospechada de algunos funcionarios españoles, que en varias ocasiones mostraron su simpatía por la situación política argentina y me despreciaron a mí cuanto pudieron, a pesar de ser español en pleno ejercicio de mis derechos».
En Galicia, de donde es natural Meizoso, los sindicatos de UGT, CC OO y Central Sindical Galega, se han solidarizado con el caso y se ofrecieron para gestionar una incorporación profesional del padre de las niñas en la Universidad de Santiago de Compostela.
Versión de la Embajada
Un portavoz de la Embajada de la República de Argentina en España indicó a EL PAIS, acerca del tema, que la misión diplomática de ese país en Madrid no había intervenido para nada en el caso. Sin embargo, precisó que existía una solicitud de extradición sobre Miguel Angel Meizoso, cursada por un juzgado de Buenos Aires, por haber secuestrado a sus hijas en aquel país.
Según el portavoz, Meizoso, que anteriormente tenía nacionalidad argentina, se encuentra separado de su mujer, y sus dos hijas quedaron bajo custodia de ésta, aunque las autoridades judiciales de aquel país le concedieron el derecho de poder visitar a sus hijas semanalmente.
Al parecer, en opinión del citado portavoz, Meizoso aprovechó una de estas visitas para trasladar a sus hijas a España.
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