Forlani promete contentar a todos los partidos del arco constitucional italiano
El discurso programático de Arnaldo Forlani, en la presentación de su nuevo Gobierno, al Parlamento italiano ha cogido por sorpresa hasta a la misma oposición, que se las ha visto y deseado para poder criticarle. Y es que el astuto líder democristiano «ha hecho promesas a 360 grados», como afirmaba ayer un diario nacional; es decir, ha prometido todo lo que pedían no sólo los comunistas, sino hasta los radicales.
Por eso, el partido de Berlinguer ha tenido que reconocer que en el programa de Forlani «hay, sin duda, cosas muy buenas», pero al mismo tiempo ha declarado que «hay que esperar a los hechos». Y hasta los radicales están a punto de darle su apoyo, porque Forlani ha recogido su propuesta de una ayuda mayor al problema del hambre en el mundo y a la revisión del Código Civil.Los radicales no están descontentos, a pesar de que a la puerta del Parlamento organizaron, antes de la presentación del Gobierno, una de sus clásicas acciones. Colocaron una mesa con tartas verdaderas de las mejores pastelerías, como se hace en los cumpleaños. Las tartas tenían 75 velitas, tantas como subsecretarios del Gobierno, para criticar el hecho.de que el nuevo Gabinete se había repartido «la torta» entre todos sus amigos.
Lo cierto es que Forlani ha querido presentar su cuatripartito no como algo «cerrado» y en clave anticomunista, ya que ha pedido la colaboración de los liberales, de los comunistas y hasta de los radicales.
Por lo que se refiere a la política económica, Forlani ha repetido lo que ya había anticipado EL PAIS: lucha contra la inflación, defensa de la lira, apoyo a la productividad y aumento de las tarifas de los servicios públicos para contener los gastos. Quizá lo que más ha gustado a todos lla sido el anuncio de serias reformas en el campo de los problemas institucionales.
Por lo que se refiere a la política exterior, Forlani, que es uno de los mayores expertos democristianos en este campo, ha confirmado la lealtad de Italia al Pacto Atlántico. El Gobierno aprobará la instalación de misiles Cruise y Pershing 2, a no ser que se llegue a una conclusión positiva en las negociaciones norteamericanas con la Unión Soviética. Y ha puesto un acento especial en la iniciativa italiana hacia el Mediterráneo y hacia los países africanos.
