El Gobierno considera la negociación de un crédito exterior privado de millones de dólares
El Gobierno ha comenzado los primeros tanteos de negociación de un crédito exterior de mil millones de dólares que, con toda seguridad, será acordado a primeros del año 1981 en nombre del Reino de España. La salida al euromercado, según informan fuentes privadas, se realizaría en un solo tramo de mil millones de dólares y no en dos, divididos en cuatrocientos y seiscientos millones a lo largo del próximo año, como originalmente se había considerado.
El préstamo sindicado, que se está ofreciendo en las mejores condiciones que hoy día se pueden obtener en el mercado internacional, será destinado a la financiación del déficit por cuenta corriente que registra la balanza de pagos. En 1980, las previsiones de déficit por cuenta corriente en el sector exterior se cifran en 4.000 millones de dólares. El déficit estimado para 1981 es algo inferior a esta cantidad.Esta será la segunda vez que el Reino de España, como tal, negocia un crédito en el euromercado. La primera vez fue en 1976, poco después de la restauración monárquica, y fue también de mil millones de dólares. El préstamo fue firmado por el entonces ministro de Hacienda, Villar Mir, y actuó de agente en el crédito el Bank of América. El diferencial del crédito era de 3/8 sobre el libor, y el plazo de pago era de cinco años después del uso de la cantidad más fuerte del mismo. Fue devuelto con anterioridad a su plazo de amortización aprovechando el superávit exterior que se obtuvo en 1978.
Las condiciones sobre las que actualmente estarían circulando las conversaciones preliminares iniciadas, hablan de un diferencial de 3/8 sobre el libor y un plazo de amortización de nueve años. El agente del crédito podría ser el Manufactures Hannover, de Nueva York, banco considerado como el «tradicional agente» del Banco de España, aunque no se descarta que la negociación se realice con la institución y el mercado que mejores condiciones ofrezca.
El recurso a los mercados exteriores privados de capitales para financiar el déficit exterior estaba implícito en varias declaraciones oficiales. El ministro de Hacienda, Jaime García Añoveros, descartó el pasado 1 de octubre, en una conferencia de Prensa en Washington, el recurso al Fondo Monetario Internacional (FMI), con lo que se confirmaban las indicaciones en favor de una salida a los mercados privados.
Fuentes oficiales manifestaron ayer a EL PAIS que no existen todavía ni siquiera documentos de trabajo sobre la prevista salida el próximo año al mercado exterior. Las mismas fuentes, sin embargo, no negaron que se esté realizando algún tipo de gestión con la banca extranjera basada en Madrid, tal como afirman fuentes privadas.
En los Presupuestos del Estado para 1981 existe una autorización al Tesoro para salir a los mercados exteriores por un total de 70.000 millones de pesetas, es decir, unos mil millones de dólares, aproximadamente. El inicio de negociaciones no descarta que la firma del crédito se retrase a la mayor conveniencia de las necesidades del Tesoro.
El Gobierno cuenta, incluso, con una autorización de otros 20.000 millones de pesetas (unos 250 millones de dólares), en los presupuestos de 1980 para salir al mercado internacional. Esta facultad todavía no ha sido utilizada. Al parecer, la comisión de financiación exterior todavía no ha estudiado formalmente la salida a los mercados exteriores en ninguno de los dos casos.
De cualquier manera, medios autorizados del sector bancario estiman que las, condiciones sobre las que se están celebrando conversaciones son las mejores que ofrece, e incluso puede ofrecer, el mercado. Un spread del 3/8, y un plazo de amortización en torno a los nueve años son las mejores condiciones en que se están negociando en los últimos meses los créditos en el euromercado.
El único inconveniente del crédito al Reino de España es el trastorno que puede ocasionar a los bancos extranjeros establecidos en España. Según fuentes del sector, la salida del Reino de España forzaría a todos los bancos a participar en el préstamo sindicado, con una notable repercusión sobre los planes de los bancos mas pequeños que, en cierto grado, tienen contingentadas sus posibilidades españolas.
Intensa actividad del sector privado
Los indicios en torno al eurocrédito del Reino de España coinciden con una intensa actividad del sector privado español en los mercados internacionales. Así se confirma que Fuerzas Eléctricas de Cataluña (FECSA) está negociando un crédito de cien millones de dólares (que otras fuentes colocan en 250 millones) a un spread de 5 / 8 por encima del libor en los cinco primeros años y de 3/4% en los cinco restantes. Los agentes del crédito serían el Crédit Lyonnais y el Canadian Imperial Bank of Commerce.Esta es la segunda vez que FECSA sale este año al euromercado. En la primera obtuvo un crédito, dirigido por Citicorp, de doscientos miIllones, al 7/8 por encima del libor, a ocho años. FECSA ha participado también en la primera sindicación en pesetas, por un importe de 3.500 millones de pesetas.
Otra empresa eléctrica en el mercado es Fuerzas Eléctricas del Noroeste (FENOSA), a la que el Bank of America ya dirigió recientemente un crédito de cien millones de dólares al 5/8% de spread por encima del prime rate norteamericano. Al parecer, FENOSA busca ahora 55 millones de dólares adicionales en el mercado canadiense y otros cincuenta millones de dólares de un consorcio árabe.
Compañía Sevillana de Electricidad también negocia otro préstamo sindicado en dólares canadienses, que puede alcanzar la cifra de cien millones. Por su lado, Telefónica ha limitado a cuarenta millones su eurocrédito, que se negocia vía el Dresdner Bank. Y la papelera Torras Hostench ya ha ultimado otro de veinticinco millones de francos suizos, cuyo agente es el Banque de Paris et des Pays Bas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.