EE UU acusa al bloque del Este de tácticas dilatorias en la CSCE
Max Kampellman, jefe de la delegación de Estados Unidos en la reunión preparatoria de la Conferencia sobre la Seguridad y la Cooperación en Europa (CSCE), de Madrid, acusó ayer a los países socialistas de querer amputar y reducir el tiempo que la conferencia principal debe dedicar al análisis del cumplimiento del Acta Final de Helsinki.Según Kampellman, los países socialistas están utilizando la táctica de retrasar los debates de la reunión preparatoria con la esperanza de cansar a los occidentales, para que el Oeste acepte reducir el debate político (que tratará de derechos humanos y de Afganistán) al menor tiempo posible. Este «juego de la espera» no va a reducir nuestras pretensiones, afirmó Kampellman, quien añadió que está dispuesto a permanecer en Madrid hasta noviembre para defender y conseguir sus objetivos.
Las palabras del delegado norteamericano, correctas y claras, reflejan el cansancio del grupo occidental ante la actitud de la URSS y de varios de sus países amigos de poner todo tipo de trabas técnicas a los trabajos preparatorios de la conferencia, negándose a dar detalles de sus aspiraciones.
En definitiva, aunque permanece la negociación, no se ve la posibilidad de un compromiso inmediato. Es cierto que la URSS no parece tener ninguna prisa, y, vistas las declaraciones de Kampellman, los americanos, tampoco. Lo malo está en que a este paso la Conferencia de Madrid está poniéndose en entredicho y en noviembre, si se inaugura, deberá dedicarse a redactar un orden del día cuya elaboración ha sido imposible hasta ahora.
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