Técnicos sanitarios denuncian insuficiencias hospitalarias en León

La junta de gobierno de la residencia Virgen Blanca, principal centro hospitalario de la Seguridad Social en la provincia de León, divulgó ayer un comunicado, en el que se denuncia la falta de instalaciones para atender a los enfermos y la negativa del Ministerio de Sanidad y Seguridad Social a construir un hospital materno-infantil, adjunto al primero, cuyas obras fueron ya presupuestadas y adjudicadas en .ochocientos millones de pesetas, hace dos años, a Ferrovial, SA, sin que hayan dado comienzo desde entonces.En la misma nota, firmada por un grupo de médicos, representantes de UCD, AP y PSOE, y el propio director del hospital, se destaca que la capacidad de la actual residencia se encuentra desbordada «desde hace diez años» por el número de usuarios, con una única sala de urgencias, «que sólo puede atender a un cliente cada vez»,y con grandes deficiencias en los servicios de consultas externas -cuya sala de espera carece, incluso, de ventilación-, radiología y laboratorios.

Semanas de espera

De acuerdo con el comunicado, los pacientes tienen que esperar semanas para ser atendidos en algunas especialidades, mientras que el personal de laboratorios «trabaja en condiciones penosas, incluso con riesgo para su propia salud». La junta de gobierno de la residencia declina toda responsabilidad sobre estas deficiencias -que han sido denunciadas innumerables veces ante todos los estamentos de la Administración- y sobre las que se puedan producir en el tratamiento de los pacientes.

El nuevo centro materno-infantil,que ahora reclaman los médicos y partidos políticos, fue anunciado, en 1978, por parlamentarios leoneses de UCD, que entonces ocupaban altos cargos en el consejo de la Seguridad Social, como ampliación de la residencia Virgen Blanca, durante una de las campañas electorales. En estos momentos, el grueso de las necesidades hospitalarias de la provincia se cubre a través de conciertos con las clínicas privadas, que controlan un total de seiscientas camas, frente a sólo cuatrocientas de la residencia Virgen Blanca.