_
_
_
_

El movimiento rebelde afgano mejora posiciones

Los combates se han intensificado en numerosas zonas de Afganistán, en vísperas del fin del mes del Ramadán. Este aumento de las hostilidades ha afectado más a determinadas provincias, y Kabul está tranquila, aunque hay un gran despliegue de piezas de artillería en los alrededores de la ciudad.El ministro de Asuntos Fronterizos, Faiz Muhammad, se encuentra en Jonst, punto próximo a la frontera paquistaní, coordinando la labor de las fuerzas gubernamentales contra los rebeldes.

La Alianza Islámica para la Liberación de Afganistán declaró el domingo, en Peshawar, que se han producido duros ataques durante los últimos cuatro días en la provincia de Junar, que es uno de los principales bastiones rebeldes. La misma fuente indica que aviones y helicópteros soviéticos bombardearon Saway el domingo, en un intento de liberar a un convoy militar que había quedado detenido por los rebeldes en esta zona, sin conseguir su objetivo.

La resistencia afgana reivindicó una emboscada que se realizó, la semana pasada, contra un camión militar soviético, y que produjo catorce muertos. Paralelamente, esta provincia se encuentra si luz eléctrica desde hace varios días, como consecuencia de un atentado perpetrado a últimos de la semana pasada contra la principal central eléctrica de Kandahar.

Por otra parte, medios diplomáticos de Kabul señalan que la artillería que rodea la ciudad no parece ser apropiada para luchar contra las guerrillas, y que está mucho más adaptada para un combate tradicional con carros. Se podría explicar la presencia de este tipo de armamento en Afganistán con una noticia que circula insistentemente en Kabul, y que habla de protestas y amotinamientos entre las tropas afganas. En concreto, se habla de una rebelión que tuvo lugar el pasado 25 de julio contra el Gobierno del presidente Karmal. La sublevación acabó a principios de agosto, tras numerosos combates entre la 14 división afgana y el Ejército Rojo, que utilizó en esta ocasión un importante convoy de blindados y camiones militares.

Aunque la calma parece haberse restablecido en casi todo el país, después de estos graves enfrentamientos, queda todavía un punto rebelde sublevado en la ciudad de Herat, al oeste de Afganistán, donde los rebeldes impiden la entrada a los soviéticos y a las tropas gubernamentales.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_