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El obispo de Tenerife ordena el traslado del superior de los claretianos

La orden religiosa claretiana en Tenerife se ha visto obligada a trasladar a Málaga a su superior y párroco en la parroquia del Pilar, en la capital de la isla, por una decisión del obispo de la diócesis que ha creado malestar entre los feligreses. A pesar de que dicha orden religiosa había prorrogado, según permiten sus constituciones, la permanencia en la parroquia de su superior por tres años más, el obispo de la diócesis, Franco Cascón, ha señalado que el código de derecho canónico invalida su continuidad como párroco después de seis años al frente de la misma. «Esta justificación no se corresponde con la verdad», ha declarado Julia Zugaza, de la comisión de feligreses.La comisión de feligreses de la citada parroquia, que suman unos 6.000, visitó al obispo de la diócesis al conocer la noticia del traslado de su párroco. «El obispo manifestó en un principio que el responsable provincial de la orden a la que pertenece el párroco le había comunicado que éste no iba a continuar en su puesto. Pero eso es incierto. En realidad, nosotros sabemos que el responsable claretiano provincial viajó desde Andalucía a Canarias y se entrevistó con el obispo para resolver el tema. El obispo le confesó que no estaba de acuerdo con la línea pastoral del actual párroco», señaló Julia Zugaza.

Las constituciones internas de la orden claretiana, una de las cinco órdenes religiosas existentes en Tenerife, contemplan la posibilidad de reelegir por tres años, «por razones especiales», a un superior que haya cumplido dos trienios en su puesto.

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