El polvorín de Soto de la Marina carecía de sistema de alarma
Los dos vigilantes jurados del polvorín Soto de la Marina (Santander), de¡ que ETA Militar sustrajo 7.000 kilos de Goma 2 el pasado 24 de julio, manifestaron ayer en la capital montañesa que carecían de experiencias en servicios de seguridad y nunca fueron entrenados al respecto: que las instalaciones no tenían alarma y que a la Guardia Civil «hacía un mes, más o menos, que no la veían por allí». Ambos empleados se mostraron en desacuerdo con la nota oficial del Ministerio del Interior, que «descargó temerariamente» sobre sus espaldas toda la responsabilidad del robo.Durante hora y media, al principio muy nerviosos y en todo momento desconfiados, Eduardo Gómez Blanco y José Luis Alvarez Díaz intentaron, sin conseguirlo, relatar con claridad lo que sucedió durante las nueve horas que estuvieron en poder de los terroristas, siendo más explícitos y claros cuando se trató de esclarecer lo sucedido en el interior del polvorín, desde las 10.20 de la noche del día 24 hasta que secuestradores y secuestrados abandonaron el lugar, unos cuarenta minutos más tarde, después de haber cargado en el camión el material explosivo.
La conferencia de Prensa se celebró en los locales de la Unión Sindical Obrera (USO) de Cantabria, en presencia de un abogado y ante algunos dirigentes de la citada central sindical, entre ellos el secretario general de la Federación Nacional de Vigilantes Jurados, Antonio Sánchez Fernández. No se permitió hacer fotos «por razones de seguridad personal», según sus palabras.
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