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Un referéndum sobre la OTAN añadiría tensiones innecesarias, afirna Javier Rupérez

El diputado centrista y secretario de relaciones exteriores del partido del Gobierno, Javier Rupérez, afirmó ayer en Santander que no se opondría a la celebración de un referéndum en torno a la integración de España en la OTAN, «porque este recurso está contenido en la Constitución», al tiempo que mostró su convencimiento de que «el Gobierno lo ganaría», pero añadió que su realización «añadiría elementos de tensión importantes e innecesarios en la vida política española».

Javier Rupérez, que abrió el curso inaugurado ayer en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, sobre Defensa, seguridad y distensión en el Mediterráneo, enmarcó el tema de la OTAN dentro de un programa global de la política exterior española y consideró «equivocadas» las posturas de los partidos que se oponen al ingreso. En este sentido, y tras afirmar que existen «malformaciones » en el análisis socialista, precisó que este partido persigue el mismo objetivo de integración europea en sus aspectos políticos, económicos y estratégicos, «pero desde pactos bilaterales», lo que, a juicio del diputado de UCD, no es conveniente ni aconsejable.La incidencia del enfrentamiento de las dos grandes potencias, Estados Unidos y Unión Soviética, en la celebración de la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación Europea, que tendrá lugar el próximo mes de noviembre en Madrid, fue abordada también por Rupérez, afirmando que no existen en absoluto problemas para su realización, aunque reconoció que la invasión de Afganistán «creó serias dudas sobre si la conferencia seguiría adelante». En su opinión, en estos momentos de crisis, «la Conferencia de Madrid puede tener una mayor eficacia y quizá pueda encontrarse en ella un entendimiento a través de la confrontación dialéctica».

Por su parte, el embajador de la Unión Soviética en Madrid, Yuri Dubinin, señaló que la actual tensión Internacional «está motivada por la carrera armamentística de la OTAN, con el fin de alterar a su favor el equilibrio militar», afirmando que los acontecimientos de Afganistán «sirven, en este concepto, a los promotores de esta campaña armamentística para justificarla de algún modo».

Dubinin añadió que la «política actual de Estados Unidos es muy difícil de juzgar», y refiriéndose a una solución al problema de Afganistán, abogó por «un arreglo político», que tendría que pasar por el cese de la «intervención exterior en los asuntos internos de aquel país y por el cese de la ayuda a los rebeldes».

«Cada país escoge su propio destino», contestó lacónicamente el embajador soviético, al ser requerida su opinión sobre la decisión del Gobierno español de acelerar el proceso de integración en la OTAN. Tras referirse a las propuestas de la URSS realizadas en 1967 para que se disolvieran los bloqes militares, se reafirmó la opinión oficial soviética contraria a que las agrupaciones militares existentes se amplíen con el ingreso de nuevos miembros.

«La importancia del acta de Helsinki», afirmó el embajador en relación con la Conferencia de Seguridad y Cooperación Europea, a celebrarse en Madrid, «no disminuye, sino aumenta», añadiendo que, desde una perspectiva histórica, no cabe una vuelta atrás de los citados acuerdos.

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Intervención de Juan Luis Cebrián

«España ha sido siempre subsidiaria y no patrocinadora en política exterior», afirmó el director de EL PAIS, Juan Luis Cebrián, durante su intervención sobre política exterior española en la Universidad Menéndez Pelayo, informa Efe.

Juan Luis Cebrián afirmó que «es preciso tomar decisiones y posiciones, y dar un proyecto de definición de la política exterior que queremos realizar». Encuadró a España dentro del área occidental por los valores que priman en la sociedad y por su situación geoestratégica, aunque señaló también que hay temas, como el de Magreb y el de Latinoamérica, «que chocan con los intereses del área occidental». Para el director de EL PAIS, es dificil resolver el contencioso en el norte de Africa, ya que, al depender España económicamente de Argelia y Libia, quedan dañadas las relaciones con Marruecos.

Finalmente, Cebrián señaló que el ingreso de España en la OTAN no va a afectar en nada los intereses del país, y también dijo que la entrada no nos va a traer más democracia.

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