La Minoría Catalana estudia la integración de Esquerra en su proyecto de pacto con el Gobierno

La dirección de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) está dividida respecto al papel que debe corresponder a Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) en el avanzado proyecto de pacto con el Gobierno central. El sector moderado del partido de Pujol opina que ERC debe ser puesta totalmente al corriente del pacto gubernamental en ciernes, el cual fue conocido por ERC tan sólo ayer, a través de la información publicada por este diario. El máximo organismo del partido de Pujol -el consejo nacional- tampoco había sido informado.

Una parte de la secretaría permanente del comité ejecutivo de CDC considera que ERC debe recibir compensaciones. Dentro de ERC existe un sector -que representa Francesc Vicent-, que ve con reticencia el pacto, pese a que el conocimiento del mismo era sólo el obtenido a través de este diario. Pero otro sector de ERC está expectante e interesado ante la ppsibilidad de que el acuerdo represente el logro de nuevos cargos. En esta segunda opción destaca el decano de la facultad de Económicas, Juan Hortalá Arau. Para superar este obstáculo personal, una parte de la alta dirección de CDC estudia la posibilidad de asegurar para el profesor Juan Hortalá y con el apoyo del Gobierno, el rectorado de la primera universidad de Barcelona, cuando cese su actual titular.Fuentes muy próximas al presidente de la Generalidad, indicaron que Jordi Pujol expresa algunas reticencias ante el enorme protagonismo que ha desempeñado en el proyecto de pacto Miquel Roca Junyent, que en el argot interno es conocido como fórmula Roca. Por ello, a últimas horas de anteayer, viernes, Pujol decidió inesperadamente desplazarse ayer, sábado, a Madrid, para asistir a la constitución del Tribunal Constitucional y, muy en especial, intentar hablar con Adolfo Suárez respecto al pacto. De esta forma, Pujol reafirmaría su papel personal, tras semanas en que de hecho el úníco representante de la Generalidad en las negociaciones ha sido Roca. Precisamente este último declaró ayer, al ser aborado tras el acto del Tribunal Constitucional, que desconocía la información sobre el principio de acuerdo de la Minoría Catalana con el Gobierno central, porque no había leído aún EL PAIS. Al ofrecerle un ejemplar del diario el diputado andalucista Miguel Angel Arredonda, Roca declinó su lectura y seguidamente mantuvo una breve entrevista con Arredonda.

Las más variadas fuentes políticas catalanas resaltaron el hecho concreto de que Roca fuese precisamente al Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo como factor capaz de despertar el máximo interés en Jordi Pujol. Lo relacionaban con los grandes proyectos de infraestructura actualmente estancados -trasvase del Ebro y polígono de Vinallop, polígono de Montigalá y túneles del Tibidabo, entre otros- y a la importancia de los mismos con relación a conocídos intereses, bancarios.

Algunas fuentes indicaron que el consejero de Política Territorial y Obras Públicas de la Generalidad, Josep María Cullell, se había mostrado preocupado por la expeditiva forma en que Roca enfocaba temas tan delicados. En el último consejo ejecutivo de la Generalidad, Cullell presentó un proyecto de ley del suelo para Cataluña y Pujol le indicó que previamente debía consultar el tema con Roca, quien, en efecto, durante largos años ha desempeñado papeles decisivos con relación a importantes empresas constructoras y urbanizadoras.

Por su parte, un destacado catedrático de universidad militante del PSC-PSOE, destacó la «irresponsabilidad» de su partido e indicó que el resultado de su reciente congreso permitía operaciones como la proyectada, así como la obtención para las mismas de un amplio consenso soc¡al.

Respecto a la información sobre la cena en casa de Miquel Roca, en Barcelona, con José Pedro Pérez Llorca, éste ha remitido una nota en la que desmiente haber estado últimamente en Barcelona, «ni pública ni reservadamente» y afirma que «no ha cenado con Miquel Roca en ningún otro lugar, en estas fechas».