Recuperadas por la policía joyas valoradas en 250 millones de pesetas

Con la detención por la Policía Nacional de Valencia de un grupo de atracadores se han recuperado joyas por valor de 250 millones de pesetas, la mayor parte del botín obtenido en el robo a la joyería Montiel, de Valencia, el pasado 26 de febrero.

El atraco tuvo lugar en pleno centro de la ciudad poco después de abrir sus puertas la joyería sin que se registrara ningún indicio exterior que delatara la acción de los atracadores, quienes durante una hora, tras recubrir con un spray las cristaleras del comercio y mantener encerrados a los empleados, desvalijaron los mostradores y huyeron sin dejar rastro. En el atraco participaron directamente tres miembros del grupo, mientras el cuarta permaneció vigilante en la calle.Los detenidos son José Emilio Campos, que actuaba como jefe del grupo, Antonio Bordón, María Berta González y Juan Arturo Ruiz. Según informaron medios policiales, también se ha procedido a la detención del joyero malagueño Rafael Portés, implicado en la venta del botín, así como del fotógrafo Francisco Gambero, quien actuó de intermediario, por lo que percibió una recompensa de millón y medio de pesetas.

La parte de las joyas no recuperadas se sabe que fueron vendidas por valor de diecisiete millones de pesetas. Junto al botín se han ocupado varios coches utilizados por los atracadores para sus acciones y una parcela que adquirió José Emilio Campos en una urbanización próxima a Valencia.

Al día siguiente del atraco, el grupo lo reivindicó para el llamado Grupo Anarquista Autónomo (GAA) mediante carta remitida a un semanario de gran difusión nacional, para invertirlo en obras benéficas. Con la detención se ha puesto de manifiesto la inexistencia de tal grupo, igual que los presuntos móviles políticos que, según la carta, justificaran el atraco.

Según informa nuestro corresponsal en Oviedo, la policía de esta localidad recuperó un alijo de joyas, valorado en más de tres millones de pesetas, que habían sido robadas en la joyería Montiel. Las joyas estaban depositadas en la sede del Banco Central en la capital asturiana y la policía pudo acceder a ellas tras detener en Valencia a María Berta González, vecina de Oviedo e integrante de una banda internacional de atracadores.

María Berta González confesó a la policía que las joyas estaban en Oviedo y firmó una autorización para que pudieran ser retiradas de la caja de seguridad del Banco Central. Según la versión de la policía, María Berta González era buscada por la Interpol y había participado anteriormente en varios atracos y secuestros.