Michelín, un objetivo permanente de la violencia de ETA

La alta conflictividad laboral que parece caricterizar a las empresas del grupo Michelin, en especial a la factoría de Vitoria, conoció ya el pasado año la intervención de la organización terrorista ETA. El director general de la empresa en España, George Rouzier, fue secuestrado por un comando de ETA Político-militar el 5 de febrero de 1979, y después de ser herido en una pierna fue abandonado en un descampado. Días después, el 19 de febrero, Luis Abaitua, director de la factoría alavesa, fue también secuestrado por un comando de ETA Político-militar, en un momento en que las negociaciones para un nuevo convenio entre la empresa y los trabajadores estaban paralizadas. Aunque tanto la empresa como la representación de los trabajadcires condenaron el secuestro, la dirección decidió reiniciar las negociaciones, y Luis Abaitua fue liberado tras diez días de secuestro. El pasado mes de mayo, una asamblea de fábrica, en la que participaron quinientos de los 4.000 niiembros de la plantilla, aprobó solicitar la absolución de los cuatro miembros de ETApm supuestos autores del secuestro.

Conflictos en la negociación del convenio

Los conflictos laborales en la Michelin de Vitoria han menudeado a todo lo largo del pasado año y sufrieron un incremento con el inicio de las negociaciones de un nuevo convenio el pasado mes de noviembre. Las negociaciones se hallan en punto muerto, a pesar de la intervención del Consejo General Vasco, por la postura de la empresa de no negociar hasta tanto no se haya rechazado toda violencia en el interior de la fábrica. El pasado 16 de mayo, Jesús Casanova Salazar, adjurlto a la dirección de personal de Michelin de Vitoria, resultó gravemente herido como consecuencia de un tiroteo que fue reivindicado por ETA Militar.Los problemas de la negociación de nuevo convenio, algunos despidos y sanciones que se han prodiicido y ciertos problemas derivados de la aplicación del convenio anterior han provocado una larga serie de huelgas y paro a lo largo de los últimos seis meses. Este año se han hecho tres huelgas semanales por mes, y a partir del mes de marzo, una huelga semanal de un día de duración todos los sábados.