Gromiko considera irreversible la situación de Afganistán

La situación del sureste asiático y, particularmente, la de Afganistán están en el centro de las conversaciones soviético-indias que comenzaron el pasado día 3 en Moscú, entre los ministros de Asuntos Exteriores Andrei Giomiko y Narashimha Rao. La posición de la India en el movimiento de los no alineados, las declaraciones prudentes y a veces ambiguas de Indira Gandhi sobre la intervención soviética en Afganistán, los estrechos lazos entre la India y la URSS, que han sido reforzados recientemente de forma espectacular por la firma de un contrato de compra de armas por una suma de 1,6 millones de dólares, otorgan a Nueva Delhi un papel esencial en la estrategia asiática de Moscú.Gromiko abordó ásperamente determinados principios en el discurso que pronunció en honor de su homólogo: la revolución afgana y la instalación de un régimen procomunista en Kabul deben ser consideradas como irreversibles. Sobre la situación creada «en torno a Afganistán», el Kremlin está dispuesto a buscar una solución negociada. Es decir, que la posición soviética no ha cambiado fundamentalmente, a pesar de que determinados términos elegidos en los discursos pueden hacer pensar que los soviéticos no son totalmente refractarios a la idea de un calendario para la retirada de sus tropas de Afganistán.

Gromiko repitió que antes de cualquier decisión en este sentido deben obtenerse dos condiciones: reconocimiento del régimen de Kabul y la garantía de que cesará toda injerencia exterior en Afganistán.

Se refirió a la importancia de la cooperación soviético-india «para la paz y la estabilidad del planeta» e hizo responsable a Washington del agravamiento de la tensión internacional, con términos duros contra Pakistán, «por permitir la instalación en su territorio de bases; de agresión y jugar un papel de cómplice en la aventura imperialista».

Vía negociadora

Más tarde, Gromiko dijo que «las tentativas de modificar las realidades que están establecidas en Afganistán no tienen porvenir. Toda discusión de esta materia, toda tentativa de injerencia en los asuntos internos afganos son inútiles. En lo que concierne a un arreglo de la situación creada en torno a Afganistán es posible asegurarlo por la vía negociadora, la URSS se pronuncia por tal acuerdo».

Gromiko aseguró que su Gobierno sostenía « incondicionalmente» las propuestas formuladas el pasado 14 de mayo por el Gobierno de Kabul y que deben servir de base a un arreglo negociado. A, condición de que la agresión contra, Afganistán cese y que la no injerencia quede garantizada, «el problema de la retirada de territorio afgano del contingente soviético, que se encuentra en este país a petición de su Gobierno, podría quedar solucionado en el curso de tal arreglo político ».