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PRENSA

Comentarios de un ministro portugués a la condena de Juan Luis Cebrián

El ministro adjunto del jefe del Gobierno portugués, Francisco Pinto Balsemao, propietario y ex director del semanario Expresso, ha hecho en Lisboa el siguiente comentario al conocer la condena de tres meses de cárcel impuesta por el Tribunal Supremo al director de EL PAÍS, Juan Luis Cebrián: «Dadas mis actuales funciones, no deseo, por razones obvias, comentar concretamente la decisión de los tribunales de un país extranjero, que es además un país vecino y amigo».Más adelante añade: «Sin embargo, considero que, como ciudadano y como profesional de la prensa hasta hace bien poco tiempo, tengo el derecho -y el deber- de afirmar, en términos generales, que cuando la ley y los que la aplican se encuentran desfasados de la realidad social, los peligros para la libre expresión saltan a la vista y se instalan, desestabilizadores, en la sociedad. Suspender una espada de Damocles sobre la libertad y la carrera profesional de un periodísta es una solución farisaica que no disfraza, sino que, al contrario, acentúa este preocupante desfasamiento».

Denuncia de UGT

La comisión ejecutiva confederal de UGT denunció ayer en una nota la paralización que actualmente se registra en el proceso democrático español y las limitaciones que algunas de las libertades públicas están sufriendo. La nota muestra su extrañeza por la «diferencia de tratamiento que los propios tribunales militares han otorgado» a casos como el de la «operación Galaxia» y el de la realizadora de El crimen de Cuenca, Pilar Miró.En la misma nota, UGT se solidariza con el director de EL PAÍS y se manifiesta en contra de su condena. «Independientemente de que toda sentencia sea aceptada o, en su caso, recurrida ante las superiores instancias judiciales, el análisis de la misma no puede su, poner, de ninguna forma, un delito de desacato (...). La labor de los tribunales ha de estar dispuesta en todo momento a una actitud crítica».

Telegramas de solidaridad

El primer secretario del Partido de los Socialistas de Cataluña, Joan Reventós, ha enviado al director de EL PAÍS un telegrama de solidaridad, en su nombre y en el de la comisión ejecutiva del partido. «Solidaridad con motivo de la sentencia», dice textualmente, «que le ha sido impuesta por el Tribunal Supremo y de la que discrepo moral e intelectualmente».En parecidos términos se ha expresado Benjamín C. Bradlee, director ejecutivo del prestigioso diario norteamericano Washington Post. «Quisiera expresar con toda la fuerza con que me sea posible», dice el telegrama, «el sentimiento de ultraje que sentimos yo y mis colegas del Washington Post por su condena. Un gran país necesita una prensa libre, cuyos directores y redactores deban ser responsables únicamente ante el pueblo».

A la redacción de EL PAÍS siguen llegando, por otra parte, continuas muestras de solidaridad, de España y del extranjero, imposibles de reproducir en su totalidad. EL PAÍS agradece por igual todas estas muestras de adhesión.

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