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Escolares de Cuenca preguntan en el Senado

Por primera vez, chavales de escuela hacen preguntas en el Senado a los presidentes de varias comisiones de la Cámara alta sobre distintos problemas que les afectan como ciudadanos, aunque sean de corta edad. Diecisiete niños de EGB de la Escuela Nacional de Prácticas, de la Escuela Universitaria de Profesorado de EGB Fray Luis de León, de Cuenca, asistieron el martes al Pleno del Senado en el que, entre otros temas, se trató de los derechos del niño.

Cecilio Valverde, presidente, dio la bienvenida al grupo, integrado, además, por doce futuros maestros que desarrollaban de forma práctica un tema de didáctica, al observar el método pedagógico empleado con los pequeños por las profesoras de la escuela universitaria responsables de la excursión educativa: Isabel Segarra, de Ciencias Políticas; Matilde Molina, de Didáctica de Ciencias Sociales; el director de la escuela nacional, Pedro Saugar, y otras dos profesoras de la escuela universitaria, María del Carmen Pérez y Teresa Cardete.Los muchachos, antes de su ex-periencia en el Senado, habían recogido muestras geográficas en el camino, se detuvieron en Villarejo de Salvanés (Madrid) para ver un poco de cerca la incidencia de la industria en un pueblo tradicionalmente agrícola, y luego visitaron el Zoo de la Casa de Campo.

Constantino Palomino, senador de UCD por Cuenca, que había tramitado la visita pedagógica, hizo papel de anfitrión y consiguió enfrentar a los alumnos de EGB y estudiantes de profesorado de EGB ante varios presidentes de comisiones, a fin de que los pequeños sometieran a los adultos a una ronda de preguntas. Resultó el momento más interesante, no sólo para los educandos, sino para los senadores, que comentaron la conveniencia de arbitrar algún sistema de frecuente contacto directo entre los políticos y los niños.

Ante los muchachos estuvieron Justino Azcárate (Asuntos Iberoamericanos), Alberto Bailarín (Defensa), Julio Nieves Borrego (Presupuestos), Luciano Sánchez Reus (Agricultura), Luis Miguel Enciso (Exteriores), Alberto Dorrero (Enseñanza Universitaria), Antonio Uribarri (Derechos Humanos), José Herrera Arcas (Trabajo) y Antonio Fernández Galiano (presidente de la Junta de Castilla-La Mancha).

Los chavales traían algo de tablas, adquiridas en actos parecidos en el ayuntamiento y la diputación conquenses, como plataforma previa hacia el entendimiento del mecanismo parlamentario. Azcárate, con vieja y sabia escuela, rompió el frío al contar la anécdota de su nombramiento como senador por designación real «precisamente por haber sido diputado en la Segunda República y por haber estado en el exilio, me dijo el Rey». Y los niños escucharon atentos consejos como estos: «Nada tan catastrófico para un país como una guerra civil; es necesario transigir y reconocer las propias faltas; no se saltan cuarenta años a la torera, pero es necesario tratar de entenderse».

«¿Por qué España se inclina hacia EE UU en materia militar?» Y Bailarín dice que hace de gallego y pregunta él: «¿Y por qué no?», pero los chicos insisten en que déra zones, y dice: «Geopolítica e históricamente, España está abocada a ese destino. En el régimen anterior quiso y no pudo integrarse en la OTAN. Ahora quiere y puede».

Enciso les aclaró que el Gobierno había explicado su postura en el tema de Irán.

Fernández Galíano anunció que «Castilla-Mancha» (el senador suprime el La por sistema) «tendrá autonomía para 1981».

Los muchachos, de raíz agrícola, preguntaron por las reformas en este sector, y Sánchez Reus dijo que «la reforma agraria ya suena a tópico, y que, actualmente, no es sólo este el problema».

Posteriormente, los alumnos conquenses fueron invitados a un refresco por la senadora del PSOE por Cuenca, Amalia Miranzo.

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