El Consejo de la Revolución bloquea la reprivatizacion de sectores económicos clave
Mientras el Parlamento portugués inicia, con cerca de cinco meses de retraso, el debate sobre el presupuesto del Estado, el Consejo de la Revolución ha declarado inconstitucional la propuesta gubernamental de alteración de los sectores público y privado de la economía.
La comisión constitucional, órgano jurídico que asiste al Consejo de la Revolución, consideró que al autorizar a la iniciativa privada a intervenir en los sectores de la banca, los seguros, los cementos, los abonos y los transportes, el Gobierno ha violado las disposiciones de la Constitución de 1976. El Consejo de la Revolución ha ratificado esta opinión, prohibiendo al presidente Eanes la promulgación de la ley.Se trata, por parte de Alianza Democrática, del segundo intento en este sentido. El Gobierno dispone todavía de dos semanas para hacer uso de la autorización legislativa que le fue otorgada por el Parlamento y por las declaraciones del primer ministro se puede inferir que el Ejecutivo intentará de nuevo forzar el veto del Consejo, demostrando una determinación por lo menos igual a la del presidente Eanes.
Dos nuevos partidos
El ya complicado ajedrez político portugués va a enriquecerse con dos nuevos partidos.Los socialdemócratas independientes, los disidentes del PSD, anuncian su legalización como partido habilitado para disputar las próximas elecciones para el mes de mayo. La nueva formación, que fue recibida por el presidente Eanes, pretende «ocupar el espacio socialdemócrata dejado vacante por la derechización del PSD».
Sus dirigentes son optimistas en cuanto a la posibilidad de llegar a un acuerdo con los socialistas para la formación de un frente electoral de las fuerzas de oposición no conmunistas al actual Gobierno. No esconden sus simpatías hacia una reelección del presidente Eanes.
El Frente Nacional, de otra parte, que tendrá su congreso constitutivo en junio, se considera la «derecha nacional » y se opone a todos los partidos de «obediencia y filiación internacional. Preconizan una «nueva Constitución» y una nueva política sindical.
Animado por el empresario norteño Guedes da Silva, el Frente Nacional no esconde sus vínculos con la ultraderecha europea.
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