"La cárcel no me ofrece garantías", dice el periodista Xavier Vinader

«No me presento a los tribunales porque ingresaría automáticamente en prisión y los aparatos de seguridad del Estado no me ofrecen ninguna garantía. Me consta -y es público- que existen filtraciones entre los activistas de extrema derecha y algunos servicios de información. Me he limitado a denunciar, a través de mi revista, una serie de acciones ilegales y ahora me quieren meter en la cárcel, acusándome de unos hechos con los que no tengo nada que ver. Por supuesto que estoy dispuesto a declarar. Estoy interesado en que todo esto se aclare», dice Xavier Vinader, el periodista de Interviu que, cuando volvía de Afganistán y estaba a punto de regresar a su casa de Barcelona, se encontró con la sorpresa de que la policía le andaba buscando.

Vinader había publicado dos reportajes en los que denunciaba las redes de extrema derecha que componían el escuadrón de la muerte vasco. Un ex policía nacional, Francisco Ros Frutos, después de estar vinculado a estos grupos, decidió, como muestra de arrepentimiento, contar su pasado a Xavier Vinader, quien lleva ya varios años investigando sobre estos temas y que, hace ya seis años, sufrió un atentado con bomba.En los dos últimos meses del pasado año, Interviu publicó sendos reportajes con las confesiones de Ros Frutos. El ex policía no ahorraba nombres propios. A principios de enero, ETA Militar asesinaba a dos de las personas citadas en el segundo de los reportajes. Días después abundaban las quemas de quioscos por todo el país, provocadas por la extrema derecha. La familia de una de las víctimas de ETAm se constituía en acusación privada, y el 22 de marzo pasado el Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional dictaba orden de busca y captura contra Vinader y Ros Frutos, acusándoles de «asesinato por inducción».

El juez Varón Cobos (el mismo que puso en libertad a Martínez Loza, a quien el ministro del Interior y varios medios informativos señalaron como cerebro del asesinato de la joven Yolanda González) dictó prisión incondicional para el ex policía y el periodista, exigiendo, además, quince millones de pesetas como fianza.

La pasada semana, Ros Frutos (que había recibido dos disparos en un atentado, poco antes de sus confesiones) se entregaba a los tribunales.

«Me sorprende», dice Vinader desde su refugio sueco, «que nadie haya investigago la serie de delitos que se denunciaban en mis reportajes. Lamento mucho la muerte de estas dos personas citadas en mi trabajo, pero quiero dejar bien claro que yo no he inventado ni a ETA ni a ATE. ETA ya conocía la existencia de estas personas y les había amenazado de muerte».

«Los culpables», prosigue, «son los que dispararon sus armas, pero también aquellos que no iniciaron una investigación ni tomaron las medidas oportunas para evitar estas muertes. Durante años he escrito decenas de artículos sobre estos temas y todos los sumarios que se han abierto se han abierto contra mí. Nadie ha intentado investigar... Es curioso».