Arte en el jardín.
Willy Muller, artista suizo, consideró que la mejor manera de exponer su arte, en todas sus dimensiones y con todas sus obsesiones estéticas juntas, era en el marco verde de su jardín, en la ciudad de Zofingen (Suiza). Otros marcos, los de cuadros gigantescos, le sirvieron para resaltar la suavidad, casi de Brancusi, de unos gigantescos huevos de Pascua, que hacen alusión a la época. Es una obra colectiva, en realidad, aunque la dirigiera Muller. Los marcos también son suyos, y para hacerlos contó con la colaboración de Albert Siegenthaler, otro artista suizo. Y los huevos fueron realizados por un escultor, Herbert Distel.
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