El PSOE pidió la dimisión de Femández-Gabano
Por veintiséis votos a favor (UCD), diez en contra (PSOE) y una abstención (PCE), fue aprobada ayer la liquidación de cuentas de 1979 del ente preautonómico castellano-manchego, durante el pleno de comunidades celebrado en la Diputación de Ciudad Real, con asistencia de 37 de los 40 miembros que lo componen.El representante socialista, José Bono, tras solicitar la dimisión del presidente de la Junta, el centrista Antonio Fernández-Galiano, comenzó su intervención refiriéndose a los devengos del presidente de la Junta, que han sido fijados por él mismo, y señala que por unos u otros conceptos, incluida la dedicación exclusiva, han supuesto exactamente 6.705.902 pesetas a lo largo de 1979.
En nombre de UCD intervino el diputado por Toledo, Gregorio Peláez, que calificó la actitud del PSOE de demagógica y dijo que rebasaba los límites de una natural oposición.
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