Docentes y decentes
«Ya ha sido aprobado el Estatuto de Centros Escolares. Con bipolarización derecha-izquierda, pero ya está ahí. (...)En la aprobación ha sido decisivo que los diputados centristas que habían manifestado públicamente su desacuerdo de conciencia con el proyecto al final siguieron la dísciplina de partido. Anteriores leyes de centros escolares han dado, como se ve, óptimo resultado a sus promotores. Sus señorías, muy bien educadas según aquellas leyes, han sabido anteponer las conveniencias de partido a su libre opinión. Es un magnífico gol de la educación del pasado.
Para vencer escrúpulos, los líderes de UCD garantizaron a los que tenían dudas -garantizaron oralmente, fuera del texto legal- que se velará por la enseñanza de los centros públicos.
¡Quiera Dios que con este Estatuto de Centros formenios a los españoles del futuro un poco mejor, de modo que cuando legislen en el Parlamento prefieran que las garantías que ahora son orales entonces se incluyan formal y seriamente en el articulado. Los centros seguirían siendo docentes, pero los acuerdos serían entonces más decentes.»
15 de marzo
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