Sentencias de Atocha

Escribo a su periódico, como exponente máximo de la libertad de expresión en nuestro país, a fin de felicitar públicamente a los componentes del órgano jurisdiccional que ha llevado a feliz término la difícil misión de aplicar la ley, en una palabra, hacer justicia, en el difícil caso de los asesinatos de los abogados laboralistas de la calle de Atocha.Tanto en la impecable actitud del presidente del tribunal durante la celebración de la vista oral del proceso como en la magnífica sentencia que ha puesto fin al mismo se ha puesto de manifiesto el alta sentido jurídico que caracteriza, en general, a la carrera judicial.

Es especialmente reseñable en la sentencia citada la referencia a la voluntad inequívoca del pueblo, manifestada en las urnas, a la hora de calificar la oportunidad de la aplicación del beneficio de la amnistía como en la apreciación de la alegada atenuante de haberse realizado el delito por motivos «morales, altruistas o patrióticos»; ello, por cuanto vincula el derecho, no sólo en su formación, sino también en su interpretación, a la soberanía popular y, por ende, concibe ésta como única legitimidad admisible.

Todo ello abre un amplio campo de esperanza en el mantenimiento y profundización de las libertades en nuestro país, en la confianza de que un poder judicial independiente es el garante supremo del sistema democrático al hacer efectivo el imperio de la ley.