Nuria Espert

se ha llevado en Tenerife un susto considerable cuando se observó que parte del vestuario de la obra Doña Rosita la soltera, de Federico García Lorca, que el Centro Dramático Nacional debía estrenar en la citada isla el próximo día 27, había desaparecido del teatro Guimerá. Al susto siguió la reacción: las ropas robadas, algunas de ellas de gran valor por ser de época y de muchos años de antigüedad, serán sustituidas inmediatamente por otras que serán trasladadas desde Madrid. Al parecer, los ladrones se conocían bien las costumbres que imperan en el mencionado coliseo, porque aprovecharon la salida del vigilante nocturno para introducirse en el local y llevarse varios vestidos de mujer, tres de hombre, varios pares de botas, gorros, guantes y un magnetófono. El suceso se produjo después de las tres de la madrugada del pasado lunes. Santa Cruz de Tenerife se halla en carnavales. Lo único que puede esperarse ahora para que aparezcan los ropajes es que los ladrones los usen como disfraces por las calles tinerfeñas.