Graves dificultades en la industria discográfica británica
La industria discográfica británica, hasta hace poco una de las más prósperas del país, se encuentra en una grave crisis y sus efectos van a extenderse pronto a toda Europa.
Las causas principales de este fenómeno son la floreciente industria de las grabaciones «piratas» y la baja calidad y alto precio de las grabaciones originales.
En 1979 las ventas de las más importantes casas discográficas del Reino Unido descendieron entre un 22% y un 30%, y los últimos seis meses han sido «catastróficos» para ellas, según fuentes del sector.
Las empresas culpan de su colapso al aumento de las grabaciones caseras de programas radiofónicos y a los graves perjuicios causados por pesudoempresas que hacen grabaciones e impresiones clandestinas que están inundando el mercado y producen beneficios cuantiosos.
Según los cálculos de la Asociación Fonográfica Británica este material «pirata» está tan extendido en el mercado que produce pérdidas de hasta veinte millones de libras al año (más de 3.000 millones de pesetas) a las empresas legalmente establecidas y supone el 5% de todas las ventas discográficas del país.
En países como Grecia, el mercado está dominado en un 60% por discos y cintas de grabación clandestina y en otros países el mercado «pirata» ha acabado con los sellos discográficos originales.
En Gran Bretaña se han descubierto en los últimos meses varias instalaciones clandestinas de alta producción a raíz de unas trescientas investigaciones policiales, pero no solo no se acabó con el fraude, sino que el mercado recibe gran cantidad de material importado.
Babelia
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