La quimera del oro

«En las últimas 72 horas el oro produjo pánicos de signo inverso. El miércoles y el jueves aumentó en 107 dólares, para caer en 48 dólares ayer viernes. Pese al retroceso de la última jornada, subsisten los precios récord del oro. La caída de ayer fue sólo un resultado del deseo de los especuladores de embolsar las ganancias de las dos jornadas precedentes.Con las últimas subidas, el precio del kilo de oro en los mercados internacionales alcanza la asombrosa cifra de 1.300.000 pesetas; es decir, más o menos el doble que a comienzos de 1979.

Y esto en lo relativo a los precios oficiales de los mercados, porque la cosa se complica si se hurga un poco en los mercados subterráneos, en-los que el precio es sensiblemente mayor y cuyo volumen de transacciones es muy considerable.

Al petróleo le llamaron oro negro. Lo era y ahora es más oro que nunca. A los hombres nos enseñaron a convertir el oro en dinero y cuando la operación amenaza con fracasar nos apresuramos a convertir el dinero en oro. Volvemos al principio. El retorno es siempre pesimista, y como síntoma, gravísimo. El miedo entra fácilmente en la gente, pero una vez instalado en ella es dificil extirparlo. Marca a generaciones enteras y vuelve del revés los pronósticos más alentadores de economistas y políticos. ( ... )»

, 5 de enero