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Vecinos de Carabanchel denuncian la existencia de 150 pisos vacíos

Durante los dos últimos años, la Delegación Provincial de la Vivienda solamente ha adjudicado dos pisos del largo centenar de viviendas vacías de Carabanchel, según ha denunciado por escrito la asociación de vecinos, en un documento entregado al actual delegado, José Luis Mas.Según datos expuestos en este documento, en el distrito de Carabanchel, el patrimonio del Instituto Nacional de la Vivienda (INV) asciende a 6.857 viviendas, de las que 150 están vacías. Este dato se hace incomprensible para la coordinadora de vecinos de Carabanchel, a la vista de que conocen a 1.500 familias que desde hace años Viven en chabolas o en viviendas infrahumanas del barrio.

Las negociaciones para que esos pisos vacíos fueran adjudicados a las familias necesitadas se iniciaron hace algo más de dos años. A primeros de septiembre de 1978, la coordinadora entregó al delegado provincial de Urbanismo una lista de 134 pisos desocupados. Esta lista ha sido ampliada a lo largo de estos meses.

Con este mismo objetivo, la Delegación encargó a un equipo de especialistas la comprobación de todos estos datos. La comisión, que según la coordinadora cobró seis millones de pesetas, presentó un informe en el que se recogían pruebas de cien pisos vacíos.

El resultado de todos estos trabajos -acompañados de innumerables entrevistas y algunas manifestaciones- ha sido la adjudicación de solamente dos de esas viviendas vacías. Ante esta situación, esta misma semana, la coordinadora de vecinos. adoptará decisiones tendentes a conseguir, no sólo que la Administración agilice sus gestiones, sino para que las adjudicaciones empiecen a ser un hecho.

El negocio de las escrituras

Los peligros de esta paralización de las nuevas adjudicaciones no son los ya de por sí graves para los chabolistas, sino que algunos adjudicatarios transfieren la vivienda oficial a familiares o conocidos, cuando la ley determina que el beneficiario solamente puede ser algún hijo que conviva con los propietarios. En el documento de la coordinadora se afirma que estas situaciones hacen que haya familias que paguen setecientas pesetas por la vivienda, y otros, por un piso idéntico, desembolsen 5.000 pesetas al mes.Otra de las trampas, la realizan algunos de los adjudicatarios a la hora de hacerlas escrituras de propiedad de la vivienda. Según la coordinadora, algunos de los que no viven en los pisos o los que poseen varios ceden sus derechos a cambio de sustanciosas cantidades de dinero. Así, viviendas que cuestan 400.000 pesetas se compran por cuatro millones; incluso explican el caso de unos adjudicatarios de la calle de Portoalegre, a los que se les concedieron dos pisos, que fueron vendidos después por ocho millones de pesetas.

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Ante todo este panorama, la coordinadora ha pedido una entrevista con el ministro de Urbanismo, por considerar que el delegado no ha resuelto ni una mínima parte del problema que tienen planteado en Carabanchel.

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