El FAPU pacta una tregua con la Junta salvadoreña
El hecho político de más relevancia en las últimas horas es, sin duda, la entrevista mantenida por miembros de la Junta Revolucionaria de Gobierno y dirigentes del FAPU (Frente Acción Popular Unificada), organización de ultraizquierda que integra incluso grupos armados. En la reunión se decidió establecer un mecanismo permanente de diálogo. El FAPU ha ofrecido una tregua a las nuevas autoridades.
Ayer, un millar de manifestantes, armados con pistolas y machetes, ocuparon los Ministerios de Trabajo y Economía, con reivindicaciones de aumentos salariales.
Mientras tanto, diversos países han respondido ya a la petición de la Junta sobre el reconocimiento diplomático de la nueva situación. El martes por la tarde lo hizo expresamente Estados Unidos y ayer Chile.
Ayer se ha sabido que por lo menos once de los altos cargos del nuevo Gobierno salvadoreño están relacionados con la Universidad Centroamericana (UCA), institución docente de los jesuitas, y que constituye desde hace años el foco intelectual de la contestación política de El Salvador. En la capital de esta república ya circulan chistes sobre este predominio en la nueva situación, y se dice que quienes realmente han conquistado el poder tras el derrocamiento del general Carlos Humberto Romero no son los militares jóvenes, sino la Compañía de Jesús.
