Los disidentes checoslovacos se declaran no culpables
Ayer comenzó en Praga el proceso contra seis disidentes checoslovacos, miembros del Comité de Ayuda a las Personas Injustamente Perseguidas (VONS) y de Carta 77, en medio de extraordinarias medidas de seguridad y con la prohibición a periodistas y diplomáticos extranjeros para que asistieran a la vista.Durante la sesión de ayer, todos los encausados admitieron pertenecer al VONS, organización ilegal, pero rechazaron que con ello estuviesen tramando una conspiración. Una de las acusaciones contra los seis es haber estado en contacto con la Agencia Central de Inteligencia (CIA). Excepto Vaclav Havel y Petr Ulil, que no fueron interrogados, el resto se declararon inocentes de todas las acusaciones, incluida la de ser «quinta columnistas del capitalismo ».
Las acusaciones contra los disidentes podrían acarrearles penas de prisión de hasta diez años. Según círculos disidentes de Praga, el juicio durará cuatro días y la sentencia ya es firme.
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