Brejnev reitera su propuesta de desarme a los jefes de Gobierno de Europa occidental

Paralelamente a una nueva ofensiva diplomática del jefe del Partido Comunista y del Estado soviético, Leónidas Brejnev, en apoyo de su oferta de retirada de tropas de la República Democrática Alemana (RDA), los medios de prensa de este país subrayan que el plan soviético no incluye amenaza alguna en caso de rechazo occidental. En cuanto a la ofensiva diplomática de Brejnev, consistente en el envio,de una carta a los jefes de Estado y de Gobierno de los países europeos de la OTAN, crece la impresión de que la nueva iniciativa del líder soviético incluye nuevas ofertas secretas que, por el momento, ninguno de los destinatarios ha dado a conocer. El portavoz del Gobierno de Bonn declinó comentar el contenido del mensaje recibido ayer por el canciller Schmidt. La prensa federal apunta también hacia la posibilidad de que la ofensiva diplomática de Brejinev podría estar relacionada con la visita a Europa del jefe del Partido Comunista chino Hua Guofeng, que tiene la intención de adquirir armamento occidental.El cauteloso optimismo con que Bonn recibió la oferta soviética de educción de misiles de medio alcance en ambos bloques militares, ha sido respaldado por el partido socialdemócrata, que quiere ahora forzar una negociación. El presidente del SPD, Willy Brandt, ha repetido ante la directiva de su partido que es contrario a la tesis de que primero debe procederse a la modernización de los efectivos de la OTAN y luego negociar, posición que, según él, «no está en oposición con la postura del Gobierno federal». Brandt ha dicho que en su opinión las negociaciones para el desarme nuclear deben llevarse a cabo inmediatamente después de que se ratifique el tratado SALT II. Al menos en un punto están de acuerdo ya los occidentales y Brejnev: debe crearse inmediatamente un nuevo código de medidas de confianza que permita entrar con pie firme en las negociaciones. A tenor de unas declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, Dietrich Genscher, compartidas por su colega suizo, Pierre Aubert, que visita Alemania Occidental, la RFA advierte que existe el peligro de convertir la próxima fase de la conferencia de cooperación y seguridad europea, a celebrase en Madrid el próximo año, en una conferencia para el desarme. Teme que se olvide en el temario el estudio de los derechos humanos en el Este europeo. Ambos ministros han hecho un llamamiento para que la conferencia de Madrid reciba «una preparación sustancial y a fondo» a nivel de ministros de asuntos exteriores para evitar su burocratización. En este sentido, Genscher es partidario de remitir el tema del desarme a una conferencia especial de todas las naciones de Europa, según propuesta francesa, con lo que la de Madrid quedaría muy recortada.