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La negociación del Estatuto gallego presenta, en principio, menos dificultades que los textos de Guernica y Sau

La negociación del Estatuto de Autonomía para Galicia, que está previsto comience hoy a nivel de ponencia conjunta Asamblea de Parlamentarios gallegos-Comisión Constitucional, presenta en principio menos dificultades que los proyectos de Cataluña y País Vasco. Todas las partes implicadas en el texto gallego coinciden en señalar que la experiencia aportada por vascos y catalanes será fundamental para marcar los límites del debate; de hecho, las innovaciones que propugnan los partidos parlamentarios en su mayoría figuran en la redacción final de los estatutos de Guernica y Sau, aunque al mismo tiempo portavoces de UCD y PSOE han destacado la importancia que tendrá la elaboración definitiva de este estatuto, por ser el primero que afecta a una de las consideradas regiones pobres.

Por el momento, parece descartarse que el texto gallego pase por la Moncloa una vez establecido el techo con los estatutos vasco y catalán y por la abrumadora mayoría con que cuenta el partido gubernamental en la delegación de la Asamblea de Parlamentarios de Galicia. El PSOE, a través del diputado por La Coruña José Luis Rodríguez Pardo, se ha declarado contrario al principio de usurpar funciones al Parlamento, aunque manifestó recientemente que si el bien de Galicia lo exigiese aceptarían que el Estatuto fuese negociado fuera del Congreso.Emilio Attard, presidente de la Comisión Constitucional del Congreso, manifestó ayer a EL PAÍS, a este respecto, que cuando se trata de implantar un estatuto de autonomía, que comporta una división de poder, «creo que de alguna manera algo tiene que decir quien constitucionalmente detenta el poder ejecutivo».

No obstante, la reunión prevista para hoy podría no celebrarse, ya que algunos miembros de la delegación de la Asamblea de Parlamentarios de Galicia no habían sido citados oficialmente a media tarde de ayer. Al plantearle esta hipótesis, el señor Attard declaró que obra en su poder un telegrama de Antonio Rosón, presidente de la Asamblea de Parlamentarios de Galicia, en el que le indica que no existe inconveniente en que comience la discusión del Estatuto. «Si no quieren venir, que no vengan», añadió, «pero nadie puede acusar a la mesa de la Comisión Constitucional de negligencia en la tramitación.»

La delegación de parlamentarios gallegos, que quedó constituida el pasado lunes, está integrada por Antonio Rosón, Juan Quintás, José Luis Meilán, Pío Cabanillas, David Pérez Puga, José María Pardo Montero, José Antonio Trillo y Miguel Sanmartín, en representación de UCD; por parte han sido designados José Luis Rodríguez Pardo, Francisco González Amadiós y Pablo Pardo; por último, Jaime Tejada y Antonio Carro defenderán las peticiones de Coalición Democrática.

La ponencia elegida por la Comisión Constitucional la componen Alberto Oliart, Rodolfo Martín Villa y Oscar Alzaga (UCD); Alfonso Guerra y Antonio Rodríguez (PSOE); Jordi Solé Tura (PCE); Manuel Fraga (CD); Marcos Vizcaya (PNV) y Miguel Roca (Minoría Catalana). Anoche no se conocía todavía el nombre del representante del Grupo Andalucista.

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