El Gobierno recomienda aumentar los salarios en un 1,7 %

La revisión salarial para el segundo semestre del año quedará limitada al 1,7% de incremento y sólo para aquellas empresas privadas cuya evolución sea favorable, de acuerdo con la recomendación aprobada ayer por el Gobierno en Consejo de Ministros. El pleno del Gabinete adoptó también la primera decisión importante en materia de contención del gasto público, al congelar la aplicación de lo dispuesto en la ley 70/1978, por la que se otorgaban derechos de retroactividad a los eventuales y contratados de la Administración en materia de trienios.La congelación de la aplicación de esta ley se determina con la excepción de las jubilaciones y se espera reduzca los gastos de la Administración en 1979 en unos 20.000 millones de pesetas. Esta decisión se enmarca dentro del cuadro de medidas encaminadas a reducir en 100.000 millones de pesetas el déficit de 400.000 millones con que se preveía cerrar el año 1979 el sector público.

En la reunión del Consejo de Ministros fue también aprobada la creación de un comité de control de la industria eléctrica, en el que participarán desde la Administración a representantes de los consumidores. Este consejo se incluye en el marco de un real decreto sobre reordenación del subsector eléctrico. Se trata de la primera decisión en temas energéticos adoptada por el Gobierno desde la aprobación parlamentarla del Plan Energético Nacional.

El vicepresidente económico, Fernando Abril, confirmó en la rueda de prensa celebrada tras el Consejo de Ministros que el programa económico será presentado en los primeros días de la próxima semana.

El señor Abril señaló en la conferencia que el Gobierno, una vez verificado que el índice de precios al consumo se ha situado en el primer semestre de este año ocho décimas de punto por encima de la previsión oficial (fijada en el 6,5%), aprobó el decreto de revisión de rentas previsto en diciembre del año pasado. La superación del tipo que se había fijado el Gobierno para los precios no es un fracaso -añadió el ministro-, sino una desviación más que justificada.

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