La DC italiana "congela" la solución de la crisis política

Nuevo golpe de escena en la difícil tarea de formar un Gobierno en Italia. Mientras ayer toda la opinión política esperaba que el presidente de la República, Sandro Pertini, diese por tercera vez el encargo de formar un ejecutivo, después de las últimas elecciones anticipadas, el Quirinale guardó un total silencio. Se supo sólo que Arnaldo Forlani, ministro de Asuntos Exteriores, había sido convocado en secreto por el presidente de la República y que inmediatamente después se reunió con los líderes de su partido, la Democracia Cristiana (DC). Al parecer, la DC considera como una «provocación» presidencial el eventual nombramiento de Forlani como encargado de formar Gobierno, ya que se opuso a la línea de la dirección democristiana de boicotear los intentos del líder socialista, Bettino Craxi, para formar Gobierno.

A la hora de transmitir esta crónica se barajaba la hipótesis que hasta hoy por la mañana se podría saber el desenlace de este deseo de Pertini de encargar al actual ministro de Asuntos Exteriores la presidencia del Consejo de Ministros. A las dificultades referidas con relación a Forlani habría que añadir el hecho de que el ministro del Exterior fue el gran contrincante del actual secretario nacional de la DC, Benigno Zaccagnini, y podría ser su sucesor en el próximo Congreso.En cuanto a los socialistas, que habían afirmado ya que estaban dispuestos a apoyar un candidato democristiano del grupo del secretario Zaccagnini, Forlani podría ser un candidato menos desagradable.

Lo cierto es que el presidente de la República se ha vuelto a encontrar entre la espada y la pared y metido en un verdadero lío, porque en veinticuatro horas le llovieron las más peregrinas propuestas de fórmulas de Gobierno. Toda la fantasía y creatividad política italiana, seguramente única en el mundo, se desencadenaron para buscar después del fracaso del secretario socialista Craxi una solución que permitiese gobernar al país y permitiese a la clase política irse de vacaciones.

Los diversos grupos políticos han hecho a Pertini nada menos que doce propuestas de fórmulas de Gobierno para resolver la crisis, por lo menos hasta el congreso de otoño de la Democracia Cristiana.