Atentado contra un antiguo centro de escuchas radiofónicas
El chalet de la calle Condesa de Venadito, perpendicular a Arturo Soria, donde el jueves por la noche explosionó un artefacto, es una dependencia del antiguo Ministerio de la Gobernación que, en la actualidad, depende, al parecer, de Presidencia del Gobierno y que estuvo dedicado a las misiones de interferencias y escuchas radiofónicas propias de los servicios militares especiales de telecomunicaciones.Este chalet, que consta de dos edificaciones y un amplio recinto ajardinado, está hoy en completo desuso y acusa un considerable abandono físico de las dependencias. Como recordatorio de un tiempo pasado quedan unas antenas de considerables dimensiones sobre las techumbres de los dos edificios.
Según ha podido averiguar EL PAÍS, este centro técnico de información desplegó una gran actividad durante el franquismo. Su frecuente trabajo producía continuas perturbaciones en los aparatos de radio, televisión y telefónicos de las viviendas comprendidas en el área más inmediata al chalet.
Sin embargo, con posterioridad a la muerte de Franco dejó de ser utilizado por sistema. Al parecer, sólo en una ocasión se volvió a trabajar en él, en enero del 78, coincidiendo con el viaje del ex secretario general del PSOE, Felipe González, a Argel, a fin de conseguir la supresión de las emisiones del líder del MPAIAC, Antonio Cubillo, a través de Radio Canarias Libre. Parece ser que a los servicios informativos españoles les interesaba entonces escuchar o interferir dicha emisora. No obstante, esta tarea parece que se mantuvo tan sólo durante un par de días y que el trabajo desde este centro -a cargo de muy pocas personas en esta ocasión- fue poco menos que experimental, pues parte de los aparatos ya habían sido desmontados y otros resultaban desfasados con respecto a las nuevas tecnologías. Dichos servicios de telecomunicación disponen de otros centros similares más modernizados.
En la actualidad, en el chalet de la calle de Condesa de Venadito, número 34, no queda prácticamente nada de valor, ni en cuanto a material, ni en cuanto a documentos.
Los autores del atentado, perpetrado el pasado jueves por la noche, parece que lanzaron dos artefactos explosivos desde un solar próximo contra uno de los dos edificios. Sólo uno de los artefactos explosionó, causando un hoyo en la tierra y la rotura de los cristales de aquel edificio. En una tapia próxima se hallaron unas siglas de los GRAPO pintadas con spray.
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