La entrevista de Garrigues con los vecinos se celebrará esta semana
Una nueva manifestación masiva de vecinos afectados por el decreto del 10 de noviembre pasado, sobre suspensión de compromisos del MOPU, tuvo lugar ayer, a las once de la mañana, en la plaza de San Juan de la Cruz, frente a la sede del Ministerio. Los vecinos intentan desde hace tres semanas que el ministro de Obras Públicas y Urbanismo, señor Garrigues Walker, reciba a una comisión para tratar de llegar a un acuerdo, sin que, hasta la fecha, el titular del MOPU haya hecho otra cosa que prometer que los recibirá, aunque sin, concretar fecha.
Ayer, a las doce de la mañana, el subsecretario del Ministerio, señor López Jiménez, hizo saber a la comisión vecinal que el señor Garrigues los recibiría la próxima semana y que la fecha sería concretada por medio telefónico el lunes por la mañana.Los manifestantes, con numerosas pancartas, apoyaron a su comisión representativa con su presencia en la calle y gritos y coplillas del tenor siguiente:
«¿Dónde están? No se ven los pisos de UCD».» «Pisos, sí; chabolas, no.» «Ya no mola vivir en la chabola.» «Ea, ea, ea, los barrios se cabrean.» «Los barrios unidos jamás serán vencidos.» «Viviendas para los obreros y no para los banqueros.» «Hemos votao, hemos votao, y todas las viviendas las han jorobao.» «Ahora que vamos despacio, vamos a contar mentiras. El ministro de la Vivienda ahora vive en San Pascual, se ha cogido una chabola y la quiere empapelar. Y como no tiene lata, no sabe dónde cagar.» Varios gritos aludían personalmente al titular del Ministerio.
Unos minutos después llegaron tres furgonetas de fuerzas antidisturbios -recibidos con grandes aplausos y con gritos de «No os necesitamos»-, cuyos mandos directos informaron a los manifestantes que debían disolver la manifestación o emplearían la fuerza. Se logró una tregua de unos minutos para que fuese avisada la comisión vecinal, que se hallaba en el MOPU esperando la respuesta del ministro. La comisión regresó junto a los manifestantes y, en la calle, se celebró una asamblea informativa, en la que se dio cuenta de la promesa del subsecretario, señor López Jiménez, si bien con su advertencia de que no se conseguiría nada si lo que pretendían los manifestantes era la derogación del decreto.
Inmediatamente, los manifestantes se disolvieron. Unos grupos marcharon en los autocares en que habían llegado, y otros, los más numerosos, emprendieron el regreso a sus barrios a pie por la Castellana. En la plaza del Doctor Marañón, la fuerza pública interceptó a los manifestantes y de nuevo les recomendó disolverse. A lo que éstos explicaron que ya lo estaban haciendo y que, cada grupo iría hacia su barrio. Todavía una gran parte de manifestantes continuaron hasta la plaza de Emilio Castelar, donde la policía impuso su criterio y ordenó a los manifestantes dividirse en pequeños grupos, a fin de que no continuasen por más tiempo ni recorrido en esa forma. La manifestación se deshizo aquí prácticamente en su totalidad. Hasta este momento no hubo enfrentamiento entre manifestantes y fuerzas antidisturbios, salvo un pequeño conato, con varios golpes de porra, en la plaza del Doctor Marañón.
Sin embargo, en la plaza de Colón todavía quedaba un contingente de manifestantes considerable, y la policía empleó botes de humo. Según fuentes de la coordinadora de asociaciones de vecinos afectadas, varios manifestantes resultaron golpeados.
Esta coordinadora redactó ayer un comunicado dirigido al ministro de Obras Públicas y Urbanismo en el que manifiesta su protesta por las actuaciones del Ministerio en relación con las reivindicaciones vecinales y con la petición de entrevista, reiteradamente solicitada.
La coordinadora había acordado que, de no ser concretada ayer la fecha de la entrevista, la comisión negociadora debería encerrarse en el Ministerio hasta conseguir fijar la fecha.
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