Vuelve la anormalidad laboral a los hospitales de la Seguridad Social

La anormalidad laboral volvió ayer a diversos centros sanitarios de la Seguridad Social, especialmente en Madrid, donde la Ciudad Sanitaria de La Paz se vio a lo largo de todo el día afectada por paros intermitentes, que en ningún caso afectaron a las urgencias, si bien incidieron en la normal actividad del centro. La policía prestó vigilancia en el interior de este hospital, al igual que lo viene haciendo en otros centros desde que el Gobierno dictara, el decreto de intervención de los hospitales, para acabar con la huelga convocada el pasado día 30, en apoyo de las reivindicaciones económicas y sociales de los trabajadores sanitarios.Convocada por la comisión negociadora mixta, en la que además de los comités de empresa de la Seguridad Social se integran los sindicatos CCOO, USO, CSUT, USO y SGS, para hoy está prevista una nueva huelga a nivel estatal, si bien tanto CCOO como USO han retirado su apoyo a la convocatoria. Comisiones Obreras explica en una nota que teniendo en cuenta la necesidad del mantenimiento de la asistencia sanitaria y conjuntarla con la suficiente presión para abrir las negociaciones, propone a los trabajadores ir a la huelga, aunque no con carácter inmediato, y siempre que sea refrendada por la mayoría de los trabajadores.

Simultáneamente a esta medida, CCOO propone solicitar el apoyo de la Diputación Permanente y de los partidos de izquierda para forzar a la Administración a negociar las reivindicaciones de los trabajadores.

Por otra parte, y al parecer como consecuencia de la situación de anormalidad que se registra en La Paz, el director de este centro, doctor Cabezas, presentó ayer su dimisión. Asimismo, medios laborales aseguran que el director de asuntos sociales de este mismo centro ha sido trasladado por decisión del INP, lo que no pudo ser confirmado por EL PAIS.

Por lo que hace referencia a la postura oficial, ésta permanece inalterable en cuanto a su imposibilidad de negociar subidas salariales hasta tanto no sean aprobados los presupuestos de la Seguridad Social.