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El "ayatollah" piensa viajar esta noche a Irán

El ayatollah Jomeini tiene previsto, abandonar hoy París con destino a Teherán, según se ha sabido esta noche de fuente bien informada en la capital francesa .

El ayatollah, precisó la misma fuente, emprenderá viaje en un vuelo charter de la compañía Air France, cuyo avión despegará del aeropuerto de Orly o del de Roissy-en-France hacia las 23.00 horas (hora local y española).

Parece ser que la autoridad oficial de Teherán cerró el aeropuerto durante el día de ayer, porque, debido a la huelga de los pilotos de Iran-Air, no podía garantizarse la seguridad del ayatollah Jomeini. Anoche se supo en París que había mediado un acuerdo secreto entre representantes del movimiento reigioso y el Gobierno de Teherán. En cualquier caso, con el aeropuerto cerrado o abierto, salvo goIpe de efecto de último momento, el «vuelo coránico-revolucionario» comenzará esta misma noche, a las once horas. Así lo afirmaron a lo largo de todo el día de ayer los colaboradores del ayatollah, que trajinaban sin respiro en vísperas de «una jornada que será histórica y crucial para la revolución».

Desde el momento en que se tuvo noticia en la capital islámica (Neauplhe le Chateau) de la decisión del Gobierno Bajtiar, de cerrar el aeropuerto de Teherán, impidiendo así el despegue del avión que debía venir a París a buscar al ayatollah, los colaboradores de este último iniciaron negociaciones con la compañía francesa Air France para concretar el alquiler de un charter en el que viajarían el líder religioso y un cortejo nutrido de periodistas. Ayer, un portavoz de la companía aérea gala declaró que, para cancelar el alquiler del avión, era necesaria la intervención oficial. Air France es una compañía estatal, y el vuelo no es turístico precisamente, sino político. Si todo se desarrolla normalmente, hoy a las once de la noche abandonarán París el ayatollah y sus acompañantes religiosos, políticos y periodísticos.

Movimiento de la fuerza aérea

Las noticias contradictorias procedentes de Teherán no enfriaron, en apariencia, la fe del líder chiita y .de sus allegados. Ayer, como una estatua de mármol, imperturbable, el ayatollah hizo sus rezos en su tienda de campaña-mezquita. La euforia invadía a sus colaboradores: «No tememos ni un golpe militar, ni una confrontación del pueblo con el Ejército. El Ejército no disparará contra millones de iraníes. La llegada del ayatollah barrerá todas las resistencias, tanques incluidos», afirmaron.Un portavoz del dirigente religioso Ibrahim Yazdi reiteró que Jomeini saldrá de París esta noche, tal como estaba previsto, y que «si los aeropuertos están cerrados, regresaremos a París».Yazdi manifestó que setenta reactores de combate F-14 de las fuerzas aéreas iraníes habían salido de la base aérea de Isfaan hacia un destino desconocido, al parecer para evitar que cayesen en manos de los partidarios de Jomeini.

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Según el portavoz, el personal militar de Isfaan ha manifestado su apoyo a Jomeini, uniéndose al personal de las bases de Hamadan y Desfool.

Otro portavoz de Jomeini, Bani Sadr, declaró que el ayatollah sólo recibirá a un emisario de Shapur Bajtiar si lleva consigo la dimisión del primer ministro.De esta forma, el portavoz desmintió la declaración de Bajtiar al Parlamento iraní de que sus representantes habían estado en contacto con Jomeini. El portavoz dijo que los únicos contactos con el Gobierno han sido las conversaciones con las autoridades militares del aeropuerto de Teherán, donde Jomeini desea aterrizar.

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