Eanes no quiere dirigir un bloque centrista
El presidente portugués, general Ramalho Eanes, expuso ayer públicamente sus reservas hacia la tesis de los grupos presidencialistas que pretenden hacer de él el líder de un bloque centrista. Mientras tanto, en Lisboa se empieza a especular con una eventual, crisis de Gobierno.Una pequeña frase del general Eanes, incluida en el discurso pronunciado con ocasión de la apertura del año judicial, está dando lugar a interpretaciones que van mucho más allá del contexto en que fue insertada. «Hay que encarar con reserva -dijo el general- presidente- la atribución imperativa al presidente de la República de funciones que no están previstas en la Constitución.»
El general Eanes se dirigía a los magistrados para recordarles que, a pesar de presidir el Consejo Superior de la Magistratura, no le competía erigirse en defensor de la independencia del poder judicial. Pero no podía ignorar que, en un momento en que se multiplican las presiones sobre su persona para asumir claramente el liderzgo de un eventual «bloque presidencial», esta declaración sería interpretada como un distanciamiento en relación a las tesis presidencialistas. Muy significativamente, el diario conservador O Día escoge esta «pequeña frase» de Eanes como título a cinco columnas.
Rumores
Mientras tanto, se empieza a hablar de una eventual caída del Gobierno que preside Mota Pinto. Para el semanario O Jornal, el actual ejecutivo puede no sobrevivir al debate parlamentario sobre el presupuesto, en razón de las implicaciones del mismo a nivel de Finanzas locales y de las negociaciones con el FMI. La diputada Helena Roseta, apodada La Pasionaria del Partido Social Demócrata, apunta también esta y otras causas que pueden llevar a Mota Pinto a plantear la cuestión de confianza.Pero para que esto suceda sería preciso que el Partido Socialista decidiese contribuir a la caída del Gobierno. Y el partido de Mario Soares parece, al contrario, haber optado por la máxima conciliación, incluso en relación con el sector de la información, donde el Gobierno acaba de infligirle una serie de golpes bastante duros.
Es tal vez por esta moderación por lo que el partido demócrata cristiano CDS ha tomado la iniciativa de proponer a socialistas y socialdemócratas una serie de encuentros para tratar de definir «áreas de consenso» en materia de política económica que podrían significar «una primera base con vistas a un acuerdo sobre la necesaria revisión constitucional».
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