La importancia estratégica de Israel reforzada para EEUU

«El reconocimiento público por parte del presidente norteamericano Jimmy Carter de la importancia estratégica de Israel para la seguridad de Estados Unidos y la estabilidad en Oriente Próximo es fundamental, tanto en lo que se refiere a las relaciones bilaterales norteamericano-israelíes como para las negociaciones de paz con Egipto», afirmaron ayer a EL PAIS en el Ministerio de Asuntos Exteriores, en Jerusalén. También se considera en este Ministerio que, a pesar de la crisis de Irán y del estancamiento de las negociaciones con Egipto, el clima político se encuentra en un buen momento.«El presidente Carter ha empezado a entender», dicen en el mismo Ministerio. Ayer, Carter declaró al recibir las cartas credenciales del nuevo embajador de Israel en Estados Unidos, Efraim Evron: «Todos conocen la importancia de este país (Israel) para nosotros. La importancia estratégica de Israel es importante para nuestra seguridad y para la estabilidad en Oriente Próximo. Israel es nuestro amigo y nuestro aliado por excelencia.»

Los medios gubernamentales israelíes están convencidos de que las posiciones de este país se han reforzado y que el peso político y militar de Israel en la estrategia global norteamericana se ha incrementado desde la degradación de la situación en Irán.

«Cuando hace dos meses el general en la reserva y ministro de Agricultura de Israel dijo al secretario de citado norteamericano, Cyrus Vance, que «llegaría un día en que Estados Unidos se daría cuenta de que el Estado hebreo es su aliado más seguro en la región», Vance, por toda respuesta, contestó con una sonrisa cortés.

Los observadores políticos de Jerusalén subrayan que las palabras de Carter al nuevo embajador israelí constituyen la primera manifestación hecha por un presidente norteamericano en la que los vínculos entre Estados Unidos e Israel son planteados no sólo en términos de amistad, sino, además, de alianza, y en la que se subraya la importancia estratégica del Estado hebrero para los intereses defensivos de Estados Unidos.

«La admisión en forma pública de que Israel se inserta en la estrategia global de Estados Unidos, transformando su posición de Estado-cliente en Estado-aliado, puede tener repercusiones significativas sobre la política norteamericana en Oriente Próximo, incluida la cuestión de las negociaciones egipcio-israelíes», mantienen en Jerusalén.

En resumen, Jerusalén espera una reducción de la presión norteamericana sobre Israel y, paralelamente, una flexibilización de las posiciones egipcias.